Vas desvaneciéndote como una nube entre mis dedos, poco a poco te dirijes a un abismo lleno de dolor y decepción en ese rincón lúgubre y oscuro de mi alma.
Y yo voy deduciendo que todos mis errores nunca se borrarán, que ni las lágrimas ni el sufrimiento pueden limpiar un pasado, porque un edificio no se mantiene en pie sin sus bases, y yo no soy nadie sin un antes.
El tiempo avanza sin mi, dejándome atrapada entre las murallas de un amor que no fue, que no es y que no será, porque la vida no es tan simple, porque tus ojos ya no se adentran escudriñando mis pensamientos, porque mis manos por más que lo desean no consiguen llegar a ti.
Esa lámina de cristal que me aparta de ti es aún mas atroz y cruel que ese cuarto oscuro en el que quisiera enclaustrarme en este preciso instante, porque a través de ella te observo, se que estás ahí, avanzo contigo, pero no a tu lado, no de tu mano, veo calladamente como haces tu vida, y yo no puedo decir nada.... y grito miles de veces, te grito a ti, le grito a la que te acompaña, y cada esbozo de sonido que sale de mis labios ensordece mis oídos y alude una cacofonía casi perfecta... entonces entiendo que yo soy ese cristal que nos separa.. y tu eres sólo una esperanza... esperanza que voy matando cada día para no sufrir más de lo que ya sufro hoy... sin ti