-un verano soleado despues del ciclon aquel, en la clase de redaccion literaria la conoci, nunca pense que aquella belleza rara se convertiria en una historia, pero mucho menos que aquella hermosura seria...
Entonces callo Bartolo.
Le habia pedido me contara esa historia que habia tratado de contarme tantas veces, pero fui atrapado por el respeto que reclamaba esa lagrima cristalina que bajaba por sus mejillas.
Desde hace 20 años se habia jubilado, habia hecho una frutifera carrera como medico, compro estas tierras en la gina de yamasa y vive acompañado solo por la naturaleza o uno mas que otro caminante que le quiera saludar, me gusta visitarle y somos amigos desde hace unos años.
Lo conoci cuando vine hacer mi pasantia rural y desde esos años somos grandes amigos , se ha convertido en mi maestro, siempre he admirado esa facilidad que tiene de engañar la desdicha.
-Entonces cenemos-dijo mientra se secaba la secrecion de sus glandulas lagrimales.
Se puso de pie dejando la vieja mecedora de pino.

Esa no era la primera vez que Bartolo me empezaba a contar la historia de su gran amor y no se por cual razon siempre dejaba la historia en el mismo lugar...

Entonces tome la desicion, despues de todo yo era la unica persona que el se habia atrevido a empezar a contarle la historia, tal vez, pense, en ese momento de su narracion necesita fuerzas para continuar necesita motivacion y durante todo este tiempo a esperado que sea yo el que le aranque del alma esa historia que lo condenaron a la soledad.
-Bartolo, cuentame toda la historia, continua, dime y entonces que paso...
Dirijio sus pequeños ojos hacia los mios y con voz dulce y pausada, inicio su narraccion:
-un verano soleado despues del ciclon aquel, en la clase de redaccion literaria la conoci, nunca pense que aquella belleza rara se convertiria en una historia, pero mucho menos que aquella hermosura seria...
entonces vi como se asomaba aquella lagrima al ventanal de aquellos pequeños ojos como el sol en las mañanas, y mientras aquellas lagrimas se paseaban por los surcos de su rostro, salio de sus labios una frase cargada de angustia:
-y entonces todo lo he olvidado, ya nada mas recuerdo...