| Yo, conozco tu soledadella, camina contigo
 y yo la envidio
 en noches como esta
 
 Tú no hablas de ella
 pero ella si habla de ti
 y me dice, que a veces
 así de repente/
 lloras
 ahí no mas
 sin motivos
 
 Tu crees que no, pero la mía,
 mi soledad, si existe
 a veces es grande
 y termino extraviado
 a veces es pequeño
 y la tomo en mi mano
 la meto en mi bolsillo
 la llevo a un lugar
 donde nadie puede ver
 y así no mas la abandono
 aunque siempre regresa
 
 Ella me busca
 cuando yo, me percato de ella
 me escondo en la multitud
 de sueños
 de luchas
 de espejos
 de espejismos
 algunas veces pasa sin mirarme
 pero otras veces me ve
 me toma, me viola,
 forma un panteón gigante
 o en el mejor de los casos
 una cárcel minúscula
 
 Cuando yo la busco
 la tomo de un brazo
 y sin importarme
 si esta o no ocupada,
 en su que hacer diario;
 de preparar recuerdos
 o inventar futuros,
 me la llevo con beligerancia
 hacia donde podamos
 estar un rato
 
 Debo admitirlo,
 la extraño
 aunque no siempre,
 me imagino
 que debo quererla un poco
 y ella a mí,
 tanto tiempo de compartir
 letanías secretas
 deben influir en algo
 
 Toda esta carta de presentación
 te la presento,
 no solo para que la conozcas,
 la verdad,
 esta descripción
 de mi mejor enemiga
 la hice para tu soledad
 debo contarte
 que mi soledad
 anda un poco sola últimamente
 y quiere conocer otras soledades
 
 Ojala tu soledad y mi soledad
 se la lleven bien
 y caminen juntas
 
 Y si algún día
 llegas a extrañar tu soledad
 no la interrumpas
 solo llama a este loco
 que siempre piensa en ti.
 
 
 
 
 |