verano de san juan en estos lare del continente americano. invacion de personas en las calles peatonales, monumentos tartamudeando sinrasones
arquitectonicas, groserias escritas en las paredes manchadas de pie a pa, con grafitis e imagenes obsenas, y de sectas que ya no existen. mi silueta recorre monumental las calles de esta lejana capital para el que no la vive, porque aqui la vida pulula como los insectos en los patanos.
abandono mi camion, arrogante, en los suvurvios y me decido por pasar la noche en cordoba capital. la luna se ve asi, como todas las noches en que se ve asi, yo esfuezo mis ideas desacompasandome del ritmo de la naturaleza, intentando formarme de un argumento para mis historias.
no concidero oportuno salir de copas hoy, pero si a caminar que bastante poco lo hago, reflexionar sobre que es lo que mas me viene en ganas para escribir.
estoy revisando el archibo de emociones que pueda quedar en mi, buscando destacar sin iniviciones las que mas me movilicen el alma. encuentro que reprimo un fuerte deseo de escribir de una manera absurda, tirando palabras en el papel, que recojo del diccionario inclusive, algo organico pero musical, sin nada de idiologia pero utilisando palabras de igualdad y de piquetes.
una pelota se sale de la orbita de su partido, y da justo en el pie del fenomeno que deje de ser con el balon en mis dominios, la shoteo de empeine, y vuelve a la cancha como se debe, con el chanfle del artista y de su musa inspiradora.
saco las monedas del bolsillo, por que lastiman mi muslo entrado en años, y un pibito me pide que lo ayude, alli van mis monedas entonces, en las garras de la mendisidad a domicilio.
tengo ganas de llorar entre sierras bien machonas,
mis penas solitarias que se resignan solo con la luna.