¿Será posible amar sin enloquecer, sin sentir el fuego hervir las entrañas, sin perderse en la existencia de quien se ama?

Llegas a mi vida como fantasía juvenil, como río sereno de aguas claras...atrás quedaron los torrentes desquiciados de amores turbios, de pasiones viscerales, de románticas angustias, atrás... ya no son.

Eres como la brisa tenue que moja lentamente, que penetra la piel con audaz sigilo, que calla mientras ama, que ama mientras calla.

No te buscaba y te hallé, tú me encontraste divagando en las calles sombrías de una existencia solitaria. Sin sentido, sin rumbo... tú me encontraste.