El silencio de Manuel.

J. Manuel C.

Poema campesio.



A mi amor, yo lo he perdido.

Está oscura la mañana
aunque está brillando el sol
mi alma se ha nublado
llora mi corazón.
El valle que me espera
en mi triste soledad
ya no es verde, ya no es claro
ya no es grande, ya no hay luz.

Lejanas voces me dicen
que mi niña se alejará
su sonrisa, su mirada
su cadencia al caminar.
Sus ojos de cervatillo
no silenciaron su amor
día a día me decían
yo te sigo esperando.

Solo un beso le dí un día
con el coraje de mi juventud
entonces me di cuenta
que no era para mi.
Sus cabellos alborotados
por el viento, bajo el álamo
estrechando su cintura
mis labios atraparon.

Dulce niña que me amas
de ti me alejo yo
no son mis brazos ni mi alma
los que están en tu destino.
Ahora quizás sientas
que me amas como yo a ti
en este campo, en este sol
yo nací para morir.

No conoces de la vida
tampoco yo, se mucho más
pero quiero que te vayas
al encuentro de otro rumbo.
En silencio yo te miro, silueta angelical
adivino esas lágrimas
que quisieras derramar
es por eso que las mías, yo he de guardar.

Tantos años hemos vivido
de quebrantos, de alegrías
mi amor por ti es solo un llanto
tu amor por mi enmudece tu voz.
Yo nací en cuna de mimbre
tú en nubes de tul y encajes,
nunca he de olvidar el día
que te visité, recién nacida.

Hoy a tu lindura,
niña de mis sueños
le dibujaron alas de golondrina,
y muy lejos volarás,
no imagino esta vida
sin tu presencia, sin tu voz
no imagino el álamo huacho,
sin el eco de tu risa.

Hoy le digo adiós,
a mi poema enamorado
hoy le digo adiós,
a mi silenciosa quimera.