los pensamientos provocan un movimiento fisico interior que determina parte de nuestra contextura fisica. una persona bonita puede dejar de serlo, merced a esas palabras que no complentan una idea natural que contenga al bien en nuestra mente, y que no llegan a pronunciarse nunca. practiquemos este siguiente ejercio: elijan una palabra cualquiera, y lentamente pronuncienla en silencio varias veces, no se como se escribe correctamente observen, pero observen como en nuestras, supongo cuerdas vocales, se produce un movimiento real. tengo la sospecha de que los pensamientos permanentes que nos acompañan, tambien mueven, tal vez en movimientos mas pequeños e impercetibles, dicha osamenta.
o sea que, la fealdad y la belleza estan sujetas a estos pensamientos en algun porcentaje; y me animo a decir, sin ser por ello un aventurero de mierda, que algunas que otras enfermedades importantes que existen, tienen su origen en ideas de cuarta que habitan en nuestras mentes, las del hombres actual.