Inicio / Cuenteros Locales / Antinoo / Mestiza ardiente de lengua libre.
| [C:13906] | ||||
| La boca trabajaba con inusual maestría sobre el cuerpo del hombre, lo elevaba y descendía, cuantas veces deseara. Las formas que la lengua delineaba eran infinitas, recorría a voluntad cada recoveco que el cuerpo creaba en sus compulsiones orgásmicas. El hombre no era capaz de  responder a su propia esencia, ella lo transportaba a un antropomorfismo fuera de toda lógica. El ya no era él sin ella, ella manipulaba a su antojo.  | 
Texto agregado el 04-10-2003, y leído por 251 
visitantes. (2 votos)
 (2 votos)
| 
 | ||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||