Restregar la carne.
Eso es.
De eso se trata.
Frotar tanto hasta que aparezca el genio
(quién sabe si aparece).
Los deseos: sólo sugestiones.
La piel: pura cáscara. Máscara.
Para qué tantos rodeos...
No voy a engañarme.
Texto agregado el 17-10-2005, y leído por 353
visitantes. (10 votos)
Lectores Opinan
10-12-2006
"Desde que se sabe que la líbido es el E. S. ya no hay nada que rascar." dice por ahí un tal nichimanchego Nocturna
04-10-2006
Que bien!. Esto me recuerda a algo de mi madre; algo Borges; algo de Cortazar; algo Gonzalo Rojas.. pero es único y entristecería saber que haya sido plagiado.. lo dudo.
Chau, y si gusta, me puede leer.. o traducir, según corresponda.
angelo_di_cossio
19-08-2006
excelente, misterioso, circular, somos personas las personas somos mascaras, mis***** mitopoeta