en esta noche fria, cuando espero encontrar un poco de consuelo,
resulta que me quedo sola esperando ver tu silueta aunque sea en
sueños...tu figura se desvanece, la imagen es solamente un vago
recuerdo, tu voz....aquel murmullo que se llevó el viento.
Te has ido, has salido de mi vida y esta vez para siempre, ya no habrá
un reencuentro, un intento, un regreso, ya no.

Cada quien su camino, su historia, su vida. Ya no miraré tus ojos,
tus labios, tus manos, tu piel. Ya no pensaré en aquella casita, con
piso de madera y chimenea, donde cada noche nos sentaríamos a leer un
libro, muy juntos, muy unidos. Ni jugaremos ajedréz, ni haré
berrinches al perder.... no sucederá... ya no.

No mirarás mi diario a escondidas ni yo los cajones de tu buró, o las
bolsas de tu pantalón... no volverás ni con el verano, ni con la
lluvia, ni con el huracán, no, ya no.
Ni mirarás mis lágrimas al decirte adiós, ni sabrás que aun te espera
este estúpido corazón, que cambia de ritmo al eco de tu voz. Nadie te
dirá como estoy porque nadie nunca supo, ni sabrá que entre tu y yo
pudo haber algo serio, pero ya jamás sucederá.

Me alejo del camino, para que puedas andar, anda, goza de la vida que
solo una hay, no pienses en lo que se fué ni en lo que será, solo vive
tu presente y disfruta todo lo que puedas, que el tiempo no regresa ni
se detiene y aquellas arrugas que mostraban madurez, se convierten
lentamente en la inevitable vejez...

Me despido con un beso, un abrazo y en la mano el corazón, me despido
para siempre, que sigas siendo feliz... amor.