No

No.No voy a dejar que te vayas así.No.
Antes te quiero en mis manos,en mis brazos,en mi almohada.
No te retengo.Es que se trata de una dulce tortura que me atrapa y me deja pegado a estas sábanas.
No,tu cuerpo en mi mano,tu sexo en mi boca,tu piel en mis labios,tu lengua que me busca,la soledad que nos rodea.
Pienso quedarme en la sombra de tu sombra,que se repite en ese espejo.Pienso viajar como esos copos de nieve,despacio y pegarme en alguna otra ventana,observando a otros amantes.
Pienso abrir las puertas y dejar pasar al crudo invierno.
Y arroparme bajo las colchas.Y cruzar mis piernas.
Pienso tomarme cinco mil pastillas para dormir y volar.Volar hacia donde vas,mi ave de paso,mi huella nocturna.
Y pienso vigilarte desde arriba,como un halcón furioso y desteñido,en este cielo gris de Petersburgo.
Y me voy a dejar caer,con un ala hacia abajo,para estrellarme,antes que llegues a tu casa.
No.