TU COMUNIDAD DE CUENTOS EN INTERNET
Noticias Foro Mesa Azul

Inicio / Cuenteros Locales / LuciaXpaz / silencio

[C:160955]

Le dije a Bee que fuéramos a comer, me miró con la cara que sólo ella puede hacer, me dijo que estaba muy cansada que prefería irse a su casa, noooo pequeño detalle Manny me había escuchado sin poder zafarme de ninguna forma, él cumpliendo su papel me dijo: - “Yo voy a comer contigo” Ahora hasta un favor me va a hacer. Bee aparentando me dijo: - Ves, ve con él. Maldita Bee.

Me trataba de convencer que aquello no tenía que ser tan malo. Con conservar la conversación ligera y superflua sería suficiente. Tomamos nuestras cosas y nos dirigimos al comedor de la Universidad, en vista de que Manny no decía nada yo tomé el mando de la conversación. – Y cuéntame ¿dónde la vas a pasar el Día del Pavo?. – En casa, nadie me invitó, ¿Dónde la vas a pasar tú?, - En casa de Lidia, - ¡En casa de Lidia!, yo le hice todo su trabajo de estadística para su propuesta… y no se digno a invitarme. Pensé: “ uuuppppsss ya la regué”, tratando de arreglar la cosa le dije: - Yo creo que Lidia me invito a mi porque sabe que ahora estoy sola y soy nueva. Él continúo: - ¡Yo también estoy solo!. Se hizo un silencio incómodo y aun no habíamos llegado al comedor.

Un intento más…Y bueno tú ¿qué trabajas? –¿A qué te refieres?, -¿Qué tema tiene tu proyecto?, -Hasta ahora no tengo proyecto definido, el Dr. Samuel rechazó mi propuesta, todo el semestre pasado me la pasé deprimido y además con este clima de mierda, no me extraña que la gente aquí se refugie en las drogas. Otra vez el silencio, después de un rato dije: - ¿Pero ha de haber algo que hayas pensado hacer? – Quería hacer dinámicas familiares en hogares interraciales, pero eso me hacía recordar mucho a mi familia, y decidí mejor dejar el tema y olvidarme de mi familia, tengo dos años de no verlos ni hablarles, después le entregué a Samuel una propuesta sobre la Obesidad en los varones, y la rechazo porque siente que más que una propuesta es un reclamo a la sociedad de mi parte, pero sabes no quiero hablar de eso. Asentí con la cabeza, decidí quedarme callada hasta que él hablara. Claramente mis temas no le gustaban.

Pedí una ensalada, y me dijo: - ¿Por qué ensalada? Con el cuerpo que tienes no deberías preocuparte por el peso. En mi cabeza: ¿Cómo debo de interpretar eso? Dije: Sabes mi mamá es vegetariana y nos enseño a comer verduras todos los días a todas horas. Pues como ves mi mamá no lo era. Guuaauuu ¿cuántos silencios incómodos voy a tener que aguantar? Maldita Bee te odio.

Sosteniendo la charola, con el abrigo en la mano, la bufanda y los guantes, como pude saqué mi cartera haciendo malabares. Manny quien llevaba un burrito tamaño gigante en la mano izquierda, podía haberme ayudado con su mano libre, pero parecía que le entretenía verme pasando trabajos, juró que hasta una sonrisilla se le salió. Por fin, nos sentamos…lo bueno de la ensalada es que tienes que masticar y masticar, lo que hace que la otra persona sea la que tenga que hablar.

Él dijo: -Y bueno que te han dicho tus compañeras de mí. Sentí como una piedra en el estómago, sin pensar dije: -nada, - ¿Cómo que nada?, - sí, nada, - Deben de haber dicho algo, - No hablamos de hombres, - Entonces… ¿hablan de mujeres?, y se hizo hacia delante para escuchar mejor mi respuesta. – Tampoco.

Ya no quería estar ahí, pero mi ensalada iba a penas a menos de la mitad. Me metía los pedazos de jitomate y las hojas de lechuga como podía en la boca. Él siguió. – Pero a alguien le he de haber parecido atractivo, no lo puedo creer que nadie haya dicho nada de mí. Seguí masticando. Él siguió – Dime la verdad…Es porque soy gordo?, ¿Por eso no le gusté a nadie?, e hice lo que menos se debe de hacer en estos casos, de inmediato contesté, - No cómo crees…

¡Manny me creyó!, Me dijo: - Entonces ¿qué es?, - Bueno Manny, piensa que mis compañeras son muy jóvenes tienen entre 5 y 10 años menos que nosotros Y se me ocurrió filosofar, - Aunque sabes cuando llega uno a esta edad yo ya no considero a nadie muy joven. A él se le iluminó la mirada - ¿Qué quiere decir eso? ¿Pensé que eras casada?, me estás diciendo que tienes un matrimonio abierto…Cuando dijo eso, yo tenía la boca llena de lechuga, no me espero, - Porque si es así yo estaría interesado en estar contigo.

No supe que decir, se me llenaba la cabeza de preguntas, ¿debía de decir gracias por considerar mis necesidades?, o ¿debía levantarme de la mesa ofendida? Se hizo otro silencio incómodo.

Texto agregado el 27-11-2005, y leído por 101 visitantes. (0 votos)


Lectores Opinan
27-11-2005 Dan ganas de seguir leyendo, entretenidos personajes y argumentos. libelula
 
Para escribir comentarios debes ingresar a la Comunidad: Login


[ Privacidad | Términos y Condiciones | Reglamento | Contacto | Equipo | Preguntas Frecuentes | Haz tu aporte! ]