Hoy realmente perdí las ganas de escribir, siento que no tengo ánimos de hacerlo, no encuentro un tema en especial del cual pueda decir algunas palabras, perdí todo ánimo e inspiración; aunque suene extraño, siento que la vida me castiga, porque la mujer que me ama y a quien amo mas allá de lo que puedo explicar está muy cerca de mi y no puedo verla siquiera, pero mejor no continúo porque perdí las ganas de escribir.

Sin embargo veo que otros tienen facilidad tremenda para expresar sus ideas y pensamientos, fantasías, frustraciones e historias personales...quien como ellos. Ayer mientras iba camino a casa escuché a 2 personas alardeando de sus "amores"... aún cuando no sabían que se referían a meras relaciones puramente físicas y morbosas... me disgustó sobremanera, pero no quiero entrar en detalles porque en realidad perdí las ganas de escribir.

Me di cuenta que hablar del amor quizá sea común en estos tiempos, no porque el amor no sea importante sino porque se ha desvirtuado la esencia de su significado, ha sido tocado tantas veces y de formas tales que parece haber perdido su importancia. Sin embargo, quedamos algunos que aún creemos y sentimos que el amor es privilegio de pocos, anhelo de muchos y tormento de otros pocos. No soy un experto en los temas de la vida, pero tampoco un ignorante, he vivido poco, he amado y también he sufrido, aunque no puedo determinar aún las proporciones de ésto último, ya que quien ama en algún momento sufre... y mucho. No quiero soy quien para dar lecciones de amor y mucho menos, pero he podido identificar a algunos tipos de personas en este mundo que viven alrededor de él en situaciones muy particulares:

Hay quienes viven buscando el amor. Muchos viven en este caso... pobres ilusos, ¿no saben que no es posible "buscar" al amor?¿No saben que el amor llega solo y cuando más lo necesitamos? Caminan un largo trecho por sus vidas buscando algo que no podrán encontrar, porque no saben que el amor es quien los debe encontrar y no al revés.

Existen quienes se esfuerzan por perderlo en lugar de conservarlo. Puedo dar fé de muchos quienes se encuentran en el segundo caso... no son capaces de ver más allá de sus propios intereses, son egoístas y mezquinos, solo les importa saber que son amados sin saber amar, aún sabiendo el profundo daño que le causan a quien supuestamente aman y hacen todo lo posible por vivir una condena esperanzados en la reconciliación. Es un círculo vicioso que lamentablemente arrastra a ambos a algo que no se puede llamar relación... sino un infierno.

Quienes lo tienen en frente pero no lo perciben. En el tercer caso se encuentran parte de aquellos en el primer caso, y otros cuantos que se preguntan: "¿cuando encontraré el amor?" sin saber que se encuentra frente a él, ignoran que el amor ya los encontró... pero no lo reconocen, y cuando se dan cuenta ya es muy tarde porque se ha desvanecido; aquí se encuentran aquellos quienes les falta mucho por madurar, mucho por vivir, mucho por sentir.

Quienes creen haberlo encontrado cuando no es así. Éste caso es uno de los mas tristes, porque aquí se encuentran los obsesos, aquellos que viven cegados por el capricho, aquellos que no son capaces de aceptar un claro, directo y rotundo rechazo... y son capaces de cualquier cosa para "convencer" al corazón de otra persona y al propio de un amor que no es amor...sino necedad. Capaces de mentir, capaces de manipular y condicionar a las personas y amigos a su alrededor con tal de lograr su objetivo... Piensan que el amor es un trofeo que solo satisface a una de las partes... me producen lamento y rabia a la vez. Lo que no saben es que lo único que logran es el distanciamiento, no sólo de quien "aman" supuestamente... sino a la larga de aquellos quienes los rodean.

Quienes lo tienen pero quieren renunciar a él. Éste caso es el más triste de todos, en el que se encuentran aquellos que son capaces de sacrificar el amor, de sacrificar su propia felicidad... ¿Motivos? hay varios: Orgullo muchas veces, por no aceptar que se ama a alguien que siempre se encontró fuera de lo esperado y que ofrece lo que siempre se esperó del ser amado; Temor de perder el aprecio y la amistad de otras personas... cuando no saben que la verdadera amistad comprende todo y no sabe de egoismos personales; Incredulidad en otros casos por no aceptar que la felicidad al fin toca a su puerta y de vivir la relación que siempre se esperó.

Quienes lo logran. Aquí se encuentran unos pocos y afortunados mortales... no hay más que comentar acerca de ellos, solo que los envidio y soy sincero... no puedo ocultarlo.

Muchos nos hemos encontrado o nos encontramos en alguno de los casos anteriores, pero muchas veces no queremos reconocerlo, quizá por orgullo, quizá por vergüenza, quizá por miedo, sin embargo prefiero no seguir con este tema porque realmente perdí las ganas de escribir...

Casi lo olvido!!! existe un grupo más de personas tocadas por el amor:

Quienes escriben del amor aún cuando perdieron las ganas de escribir... no tengo más que decir.