Tu problema, casi hombre,
Es que buscas respuestas
A interrogantes que ni tu razón
Se los puede otorgar.
Asumo mi falta, de proyecto a completar
De escapar y eludir
Pensar para ti respuestas
Que pretendes encontrar en mí.
Buscar razones es lo que evito
Que ayuden a nuestra realidad.
Nuestro problema de amores jóvenes,
Es que no nos dejamos amar,
Buscando complicar nuestro pesar,
Con equivocas situaciones,
Con segundos que corren,
Con terceros que argumentan,
Con cuartos que esperan
Que explotemos nuestro amor,
Que enjuaguemos nuestras almas,
De pasados y rencores,
Con dulzuras entre sábanas.
¡Es cierto! La inestabilidad nos reina,
el miedo nos separa,
y el amor nos empapa.
Y acaso… ¿lo podemos evitar?
¡Si solo nos encontramos
a un impulso de distancia!
Tanto se nos ha ido de las manos
Este florido espiral continuo,
Que hoy hemos decidido fracasar,
Y no hacer caso a los latidos.