fiesta infanta
cargadas de risas,
llantos malcriados pero dulces.
Dulces, chocolates y un payaso
que lanza canciones embelesando el ambiente.

Las caritas mocosas aun carcajean
y los pasitos son sempiternos.

Las manos cálidas acariciando la nada
y los besos de zarcillos
que ponen de ornato.

Cuentos de Luciergas
que cantan melodías divinas
y duendes de seis patas
para bailar mejor.

Dame la mano y danzaremos
mi bella infanta...
y amaremos el uno al otro
al compaz de una Mistral
y si te llamas Rosa yo seré un Zorzal,
un Ruiseñor o una oda al corazón.

cántame, voz bendita, y lloraré
alegrías caídas y abundantes.
Si rozas mi tes para que pueda sentir el cielito,
pués, me das un besito, las ganas me inundan
y no habrá sincopas ni pizzicatos,
sólo un viejo regocijando el aire
con sus sentires, y una cola laaaarga agitada,
un gorro color belleza y caritas en su traje
para cautivar los sentidos.


NOta: a mi hijita, bendición de Dios. Que siga el camino del bien y siempre sea feliz.