¡Ay!, grité

La puerta apretó el dedo
El dolor ha llegado temprano
Hay gritos que empañan y ahogan la armonía

Mi vida yace bajo tierra
Germina un anhelo eterno
Un grito borra el sol naciente
Sucesos que caen como vidrio
Dos pedazos se incrustan en mi atención

¡Ay!, gritó...

Todos miran la sangre
Soy el cristo de moda
Clavo una corona de espinas de plástico
Mis manos yacen perforadas por pasados
Voy a resucitar, les grito
Ellos, escucha y esperan...

El tiempo pasa
El mundo gira
Un libro agoniza
Sobre historias jamás grabadas,
Contadas...

Hago una zanja de agua dorada
Entro y remojo mi pan
Brillo y mi carne agoniza
La muerte empieza a frotarme
El cielo se hace blanco...
El paraíso, grita una dama
La miro, sonrío

Hoy es el primero de todos los hoys
Veo gente asustada por la muerte
Sueñan con ojos abiertos
Corro sin cuerpo ni piso...
Soy un ángel, pienso

Ya lejos en el aro de oro
Pido indulto,
Bondad a los malos,
A un dios ocupado

Nadie escucha
Nadie ve el sendero...
Nadie muestra una tarde de gloria
Un ave baja del cielo
Se posa en mis manos...
La acaricio
Le pido que me ame
No, me dice

Ya solo
Ya viejo
Ya en las alturas del sentimiento
Puedo estar más solo
Mas viejo que nunca...

Puedo terminar este texto
Nadie dice no
Pero...
Por qué no seguir
Por qué no morir mientras vivo...

Y es todo
La muerte está tras la cresta de la tarde...
Todo es vida
Todo es muerte
Todo es...
Tu
Yo



San isidro, septiembre de 2006