| Si me das el sime comprometo
 a pintar con tres manos
 y en dos días
 La Gran Muralla China,
 a cruzar a nado en diez minutos
 el Canal de la Mancha,
 a esculpirle un par de
 hermosos brazos
 a la Venus del Milo,
 a desmalezar en media jornada
 la Selva Amazónica,
 a traducir en cinco minutos el Corán,
 a derretir Groenlandia con
 un simple encendedor.
 
 Si me das el si
 yo te prometo
 regalarte orquídeas
 cada mañana,
 pintar en óleo con esmero
 todos tus gestos,
 aprenderme de memoria
 todas tus mañas,
 complacer cada detalle
 de tus caprichos,
 construirte un altar
 y hacerte diosa.
 
 Si me das el si
 yo te aseguro
 que me volveré loco
 de contento,
 pregonaré por las calles
 que estoy de fiesta,
 les diré a todos
 que ya no duermo
 que la dicha por ti
 me tiene insomne,
 que la mujer de mis sueños
 me pertenece,
 que mi vida anodina
 ya tiene sentido.
 
 Ahora, si me dices que no
 devuelvo todo:
 los yen de los chinos,
 el traje de hombre-rana,
 las tijeras de podar,
 el cincel y el encendedor,
 me subo al Benjí
 y desde allí me arrojo
 sin deseos de nada,
 sin mística ni fe
 y lo que es más abrumador
 sin la perra cuerda
 que me sustente...
 En tus manos está
 la vida de este pobre
 y triste enamorado…
 
 
 
 
 
 
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