A veces lluevo por dentro
como para llenar un balde
o una tina
en la que se bañan mis rencores.
Y cuando esto sucede
germinan rosas de melancolía
y los sapos de la tristeza cantan
en mi garganta.
Es como si se abriera una llave
en el cielo de mi jardín
y entonces cayeran las pesadas gotas
empapando todo
pintando todo de azul.
Quisiera ahogarme en esta lluvia
pero por necesidad nado
y subsisto en la realidad
para sufrir.
A veces lluevo por dentro
y que bueno que la noche
lloviera conmigo.
Texto agregado el 28-10-2006, y leído por 146
visitantes. (4 votos)
Lectores Opinan
12-03-2007
Me involucro tanto con esa lluvia que a veces yo sí me ahogo... hueney
18-11-2006
que forma de trasmitir esa depresiòn intensa, ocasional donde bien dices "germinan las rosas de la melancolìa", suficiente para entender la dimensiòn de la tristeza... luzyalegria
03-11-2006
Bleh... ¿Sabes? Usualmente, la lluvia interior lleva una deliciosa ráfaga que arrastra nuestros mil y un rencores y un par de amores... No hay crítica para el poema; muy bueno. Nos leemos pronto. En alguna noche lluviosa (del interior o exterior...). Andreau
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