¡Que te llamen CAPRICHO!, por que conmigo te quiero, para mi, para mis noches, mis días, mis alegrías y mis pensamientos obscuros.

¡Que te llamen DELIRIO!, no importa... por que entre tus brazos me duermo, para soñar, que te beso, que te deseo, como la espuma al mar, como la luna a su reflejo.

¡Que te llamen VICIO!, por que hasta para respirar, te necesito, por que no hay noches sin ti, por que sin ti el teléfono no suena igual, no miro igual, tu ausencia no me deja vivir en paz.

¡Que te llamen REMEDIO! por que tus palabras son las correctas, las indicadas, las que necesito, las que pienso, las que sueño, las que deseo, las que me devuelven la salud y la fe.

¡Que te llamen DESEO!, por que tu piel que toco, tus labios deseo, tu pecho desnudo que contemplo, por tu risa, tu sonrisa, tu estima, tu piel cubierta sobre la cama vacía de penumbras lujuriosas, encuentran paz al remedio, dicha al consuelo, pasión al llanto.

¡Que te llamen MEDICINA!, por que hasta la gripe mas temida se me alivia con tu presencia de niño, mi niño, que no tienes nombre, ni en sueños, ni en risas,

¡Que te llamen MI VIDA! si es la que tengo contigo, sin que estés, si es vida cuando no te veo, cuando te vas, cuando no estas.

¡Que te llamen TRIZTEZA! a las tres de la mañana por tu olvido, por tu estafa, por tu risa sin sonido, por tus ojos, por tu mirada, por ti contigo y para ti.

Que te llamen _____________ por que el conjunto de letras que lleva tu nombre, me asombre, me obliguen, te idolatre, por que no te quiero, en mi deseo, no te amo no te necesito en mi vida, por que no solo eres tu, ni tu cuerpo, ni el mas allá en el que pienso en tú vida, mi sueño, mi anhelo, mi ensueño, por que en ti es todo y no hay nada.