| Alex estaba calmado, fumaba un cigarrillo y me miraba desde el sillón. Tenía la camisa manchada de sangre y un moretón en el ojo izquierdo. 
 --¿Por qué mataste a ese hombre?
 
 --¿Has vito alguna vez las monedas que se dejan en el cenicero del coche?
 
 --Sí Alex, las he visto, pero ahora lo que me importa es saber porqué coño mataste al tipo.
 
 --Las monedas se acurrucan allí, y están como dormidas…
 
 --Alex, no me vengas con que lo has matado por robarle las monedas del cenicero.
 
 --No amigo, lo que intento explicarte es que ese tipo no tenía ni una puñetera moneda.
 
 Le acerqué un vaso de wiskey y encendí la televisión.
 
 --Vamos Alex, suelta ya la carga, me aburre la psicología.
 
 --Yo mismo tengo miles de esas monedas acumuladas en el coche, se mezclan con las cenizas y alguna colilla. Pero el caso es que ese tipejo no tenía ninguna ¿Me entiendes? –Alex dio un trago y cerro los ojos--. Se paseaba montado en su mierda limpia y me retó.
 
 Por la tele las noticias daban el parte del tiempo: “Temperaturas en ligero descenso”. Una chica señalaba las provincias afectadas.
 
 --Muy bien Alex, dime ¿qué fue lo que hizo ese canalla? –encendí un cigarro.
 
 Alex se carcajeó y su wiskey se derramó junto a la sangre ya seca de su camisa.
 
 --Simplemente me retó. Habíamos estado bebiendo toda la mañana y desde un principio hubo algo que no me daba sabor en sus palabras. No era un tipo normal…Ya sabes, gente como tú o como yo o como el desgraciado que vende “helados” en la puerta del colegio--se levantó a servirse otro trago--. Estaba demasiado limpio, ¿me captas?
 
 --No me jodas el alma colega, ¿no me digas que lo has matado por no tener nada que esconder?
 
 Una vez sentado con su trago volvió a reírse, una risa cansada y tranquila, la sonrisa ajena es siempre tranquila.
 
 --Te equivocas --me dijo en un susurro--, Si he matado a ese tipo es simplemente porqué no pude descubrir donde escondía “esas monedas”. Un tipo demasiado listo para mí. Por eso le maté, no quiero competencia.
 
 
 Para mi Amigo/colega Patasflacas-quebradas. A mí la competencia me inspira y me impulsa.
 
 
 
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