Dedicado a aquellos que lejos del hogar han muerto antes de morir en las garras del vicio y el crimen.

Triste es un largo camino triste,
el que ya no se puede esquivar.
Triste la mala senda que escogiste
porque a nadie quisiste escuchar.

Tristes, el amor al que heriste
y esos ojos maternos que hicistes llorar.
Tris la luna que alumbra triste
tu cuerpo desnudo en la orilla del mar.

Triste la tarde cuando partiste
jurando, a tu pueblo, jamás regresar.
Tristes, el amor al que heriste
y esos ojos maternos que hicistes llorar.

Triste, fatal y vana codicia de triste,
que a los Seres humanos hace flaquear;
la pobreza espiritual, eso es más triste.
Pues, a la tumba has de ir como naciste.

Triste el cadaver, solitario y triste,
que las olas arrastran hacia dentro del mar.
Triste, el fruto del mal que te hizo soñar;
porque ya estabas muerto cuando moriste.