. EL CAMINO AL INFINITO.
(Cuento Zen)

Había un hombre en una lejana aldea que constantemente se preguntaba cual era su destino, cual era su camino. Así un día decidió salir a buscarlo y andando por una senda llego a una encrucijada de cuatro direcciones. Allí parado e inmóvil se quedo pensativo y confuso, mirando al frente a un lado y a otro. De pronto y a lo lejos divisó la figura de alguien que se acercaba por una de las sendas y cuando estaba más cerca vio que era un viejo monje, al acercarse le pregunto:
¿a dónde lleva el camino por el que usted viene?
-Este camino joven andante lleva al infinito.
El transeúnte un poco confuso pero sin darle importancia le pregunto que adonde llevaba el camino de la izquierda, nuevamente el monje le indicó al infinito.
Por último le pregunto donde llevaba el de la derecha , y la respuesta fue la misma.
-¿Cómo puede ser que todos los caminos lleven al infinito si cada uno va en una
dirección?
-En la vida puedes elegir el camino que desees ,unos serán más complicados de andar otros menos complicados de andar, algunos con poca pendiente otros con mucha pendiente, cada uno tiene sus características , así que debes tener mucho cuidado con el que eliges pero ten en cuenta que al final todos terminan en un punto común y que nadie puede eludir que es el paso de tu energía a otra esfera de la existencia, la muerte, por eso elijas el camino que elijas usa parte de tu tiempo para convertir esa energía en una energía pura y limpia en la energía que todo lo inunda, en la energía de Buda .