Jesús de Nazaret fue gran hombre, uno de los más importantes que tiene la colección de hombres geniales del mundo; él no era un súper galán, tampoco era comerciante, no ofrecía más que su buena voluntad y la predica para el conocimiento de la personalidad Suprema; fue famoso, es famoso, curaba gente, resucitaba a los muertos, regresaba al buen camino a las prostitutas, tuvo muchos seguidores y 12 discípulos.

¡Caramba! Fue un hombre verdaderamente genial, un revolucionario nato, un revolucionario de la paz, el amor, la justicia, la verdad, el perdón, la no-violencia, de la igualdad. Un hombre que se enfrentó al mundo solo, en una época en la que dios era exclusivo de los cielos incorruptiblemente aristotélicos.

Él se enfrentó a su destino, dejó que una sociedad corrompida lo juzgara vilmente sólo por hacer el bien. Vaya, ¡qué tiempos aquellos! Indiscutiblemente no fue la época de oro de la predica como fue con Siddharta o cuando dios se encarno en Krishna o los tiempos del santo Chaitanya Mahaprabhu o hasta para el mismo Moisés, nadie en esas sociedades fueron tan rudos como con Jesús.

Más allá de cualquier creencia religiosa cualquier ser humano que quiera cambiar al mundo sin violencia y con amor al prójimo es digno de alabarse, porque Jesús fue un hombre valiente que no se valió del acero para enfrentar a una sociedad carnicera y poco creyente en el verdadero amor de la personalidad suprema.

Jesús fue un hombre genial, valiente y verdadero…

Después hablaré de otros hombres geniales que ha tenido la humanidad…

HARE KRISHNA!!!!