Los inútiles




Se ha derramado, sencillamente
Ha caído sin control
Una vacía tina, una tina fantásticamente
Grande.
Y repleta de sentimientos, sensaciones,
Anhelos, sueños, convencimientos con suerte.
Llena de deseo, de añoranza, de desperdicios,
De basura.
Llena de mentiras, de miradas sinceras,
De llanto y hambre.
Repleta de poder nocivo y de escaladores
Fracasados, que, por demás han sido
Despreciados y acusados por sus comparsas.

Definitivamente, se ha derramado
Una tina plena de incongruentes
Confusiones, decepciones, malos entendidos.
Y al derramarse ha arrastrado consigo
A los que empujaban, los que, desesperados
Han roto la inercia que un día ellos crearon
Sin pensar que su codicia acabaría creando
Un desorden en sus propias mentes.


Aguadulce, julio de 2007
José María de Benito