EL NENE DE OJOS DOS Y LA HUESPED

(una charla sin remordimiento)



- ¿Qué pensás de la muerte?
Pregunta el nene de ojos dos a la propia muerte sentada frente a él.
- Nada. Es inevitable.
- Esperaba algo más profundo...¿Qué es lo que más te gusta de la muerte? -insiste el nene.
- Me gusta escuchar mi propio llanto por los difuntos, sin que nadie se dé cuenta. Creo que les interesa un pito mi angustia.
El nene asiente con la cabeza y pestañea.
- ¿Qué es lo que más te gusta de la muerte?
Continúa insistiendo el nene, mirando fijo y profundo para sorpresa de la muerte que no esperaba tal pregunta otra vez.
- Me gusta sentarme junto a la viuda y desempañar el espejo ovalado con la manga, aunque no me lo pida...¿me pasás la sal?
- Ya tiene demasiada. Te invité a comer arroz con mejillones y no sal con arroz con mejillones.
- Si, en realidad tenés razón pero tus ojos dos no dejan de perseguirme en todo el día y a veces desearía conocer a la muerte de la muerte para dejar esta vida torturada por tu mirada.

El nene baja la vista por piedad y sigue comiendo sin tentarse.