Caminar por una avenida humeda casi llegando al trasnoche puede provocar nostalgia, un dia cualquiera provoca reacciones encontradas.
Puedo creer que es eterna esa avenida, caminar y pisar las hojas secas de los arboles puede recordar todos mis dolores, esa misma humedad que impregna mi cuerpo puede agudizar aquellos, el cigarrillo que me acompaña puede recordar sabores y sensaciones de antaño.
Subi al colectivo con sus vidrios empañados del baho de mi aliento lo cual abre mis recuerdos.
llego a aquella plaza, me recuerda que me gusta sentarme en el suelo en esta misma juntarme con aquellos que ya partieron me hace recordar muchas cosas que esta noche no quiero recordar.
Sigo mi camino y encuentro en esta misma avenida a un padre enseñando a su hijo a tocar el acordeon, los veo y me gusta el entusiasmo que pone el chico, yo los veo, ellos no me ven.
Saco un cigarrillo de mis anchos bolsillos, humedos por la lluvia, ellos terminan su cancion cuando el padre acaricia el pelo de su hijo y le esboza una pequeña sonrisa de complacencia, dudo en dejar una moneda, era otro el valor que tenia para ellos y para mi, yo escucharlos, ellos tocando, prefiero llevar el cigarrillo a mi boca,mirarlos por ultima vez y seguir mi camino.
Sigo por esa avenida, veo teatros y fiestas que no me pertenecen, veo actores en las calles que buscan a esa hora el ultimo espectador, la ultima sonrisa, me cuesta creer que a pesar del frio aquellos no temen que con el clima humedo se corra su maquillaje ¿ Que pensaran aquellos? ¿Una ultima sonrisa y a dormir, o aquellos teatros prometer la ultima ilusion que sirva de puente al sueño que pronto se viene? solo me dedico a contemplar.
Cada vez veo menos gente en las calles, veo a lo lejos a un hombre depositando diarios en un local que no conozco y ni se que diario es, prendo otro cigarrillo, observo las ventanas de los apartamentos con sus luces a medio apagar, y sigo mi camino, veo a un hombre caminar en sentido contrario y una mujer que queda con sus manos en su cara, y gotas de lluvias que corrian por sus mejillas, no se que le ocurre, le pregunto, no me responde, nadie en esa avenida lo hace y sigo mi camino.
Siento frio en mis manos, mis botas estan humedas, llego a una interseccion dos mujeres me hablan, simplemene las miro, esbozo una sonrisa y sigo.
Despues de tanto caminar,tomo el ultimo colectivo el cual esta poco iluminado, solo voy yo y una mujer que no se si esta triste o melancolica, la miro, ella me mira, y vuelvo mi cabeza hacia mi ventana, el baho de mi aliento, la humedad y la lluvia hace que vea muy poco al exterior. Veo mi bolso, recuerdo un libro que una vieja amiga me regalo, bajo mi cabeza para sacarlo,al hacerlo siento el olor de mi perfume que a muchos les gusta, tambien me hace recordar otros olores, veo el libro, se llama ´´ prefiero el invierno... el verano es todo lo que no soy!,veo el primer capitulo por nombre´´El Pez se pudre desde la cabeza, levanto mi vista y veo que esa mujer ya no esta y que llegaba al apartamento que alquilaba, hago detener, el chofer abre las puertas, el sonido de las puertas automaticas contrasta con el sonido del movimiento de los arboles,me bajo, pienso, antes de meter las manos a mis bolsillos para sacar las llaves pienso en varias cosas, primero en no leer el libro, porque ya tengo una respuesta, me di cuenta que la nostalgia y la melancolia de esa noche, las puedo encamniar por esas avenidas hacia donde yo quiera, si asi lo deseo. Que despues de un raro invierno, una mala primavera es mejor no estar buscando una lagrima en la arena, lo otro que encontre cuando realmente quize darme cuenta, es que esta noche habia sido una de las mas lindas de mi vida, y que prefiero el invierno... el verano es todo lo que no soy.