AREQUIPA




Senderos de papel ,
Elegía del tiempo inanimado,
Reliquia descubierta y esparcida
En Pasado, presente y futuro.


Hierba,
Árboles
Y ríos,
Escriben su testamento
de próspera vida,
sosteniendo de tu entraña
El pedestal de la hermandad.

Uno a uno
Tus rostros Aparecen
esculpidos por el alba y su mano creadora,
rebosando de magia y magnetismo
los secretos del sillar.


Envuelto,
Erguido,
Como soporte principal
De adoraciones.
Largo pasadizo,
Seno inmaculado Y exactitud servida por su roca


Constante en el horizonte…
Contempladme aquí estoy!
Mi hábitat retoza en vuestras retinas.

Oh… viajero creador de mi estampa viva,
Son tus pasos mi compañía,
En Tu mirada persisten
La belleza de mis cimas,
En mi cúspide has sembrado
Al eco en tu sonrisa.
(Misti)

Han encontrado en vuestro campo
Su templo las semillas,
El comienzo de su viaje
Ha Fenecido,
En esta tierra prometida.


La fértil mano de dios
Acaricia tu frondoso valle,
Ah… campos seducidos entre ríos impolutos
Son también tus bellos prados
La copia feliz del edén.


Abismo de eternidad,
Refugio inamovible de la niebla.
Gran río de vientos besando tus contornos,
Con mesura tus quebradas se asemejan
A cascadas de cristal
(Colca)

Oh! rey de las alturas
¿Donde has ido?

Ángel de eterno luto
Y pañuelo blanco al cuello,
tus alas Protectoras
dan cobijo al firmamento


Fulgure en tu regazo
-Recóndito tesoro de los Andes-
La esmerada primavera,
La perfecta armonía
De Tu excelsa virtud.


Fastuosa,
Blanquecina,
mi huella de añoranza se dibuja
Entre las rimas

Los hijos de los dioses,
con lagrimas
de dicha
Te bautizan

Y Los hijos de los hombres
Te proclaman
Bella,
Amada,

Arequipa!



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