Deliraba en mis angustias
con el suelo sucio y hediondo
alcanzado de cansancio, yo deliraba.
No tiempo para llantos en zona cualquiera
sin pérdidas no se puede lograr lo deseado
hombros libres adoquinaran pueblos mañana.
Aquí nadaron los últimos instintos
cubiertos de lodo;
una quina adorna el malestar
de los que han abjurado.
Texto agregado el 28-06-2008, y leído por 111
visitantes. (2 votos)
Lectores Opinan
10-07-2008
Inclaudicable frente a los avatares de la vida para seguir de pie, a veces a duras penas, pero erguido.Mis ***** almalen2005
30-06-2008
Waww, que profundo, que fuerte. Saludos. avefenixazul
29-06-2008
aunke el cielo mismo caiga sobre tus hombros, siempre se debe sacar fuerzas de donde no hay para soportar porke antes muertos ke caidos... excelente!!! trae mucha fuerza te llena el espiritu de poder para salir adelante te felicito. besos catanava
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