He venido a caer
al abismo obscuro
y profundo
de mi ser
he venido a caer
y he permanecido
cayendo lento,
doloroso y lento

ES TANTO, TANTO
que ya no me encuentro

y a veces lo siento
y continuo cayendo

a un abismo sin salida
que no encuentra la luz
y solo se hunde en su guarida

he cambiado y desgarrado
el crecimiento lo he guardado

y a mi ser lo he ignorado

ahora todo es en otro lado

no hay luz, no hay salida
solamente un hueco oscuro
en donde anida mi corazòn

en donde se esconde
y se acobarda a lucir

en donde se estanca
y ya no quiere decir

ni sacudir, no recibir . . . . .

he permanecido cayendo
y sigo cayendo aùn

mi cara se ha deformado
de grandeza y adjetivos
con simpleza
que solo guardan gritos
y abismos sin belleza

què serà de la vida que se deja escapar?

què serà del corazòn escondido
que huye queriendo olvidar
aquella verdad que ha de callar
y no quiere nunca poderla sacar
. . .

y gritar, y reìr, y gozar y sufrir !








a dònde van los muertos que no vivieron?


sòlo causan dolores y un gran delirio
a dònde van las grandezas, simplezas
y ambiciones con promesas ?

al abismo oscuro
en donde se halla mi augurio
que no podrè aceptar

que he de aprender a poderlo descartar