Hoy llego temprano a casa, habia terminado las labores diarias del trabajo y simplemente no sentia la necesidad de quedarse a perder el tiempo en la oficina; al entrar tuvo la sensacion de encontrarse en otro lugar. ¿Es esta mi casa?; periodicos, platos sucios, sustancias repartidas por el piso, polvo y mas polvo rondaban dando a la atmosfera un aire de abandono... Hace tiempo que no ordeno, esto parece un apartamento abandonado, volvio a repetir, no parece, es.
Camino hacia su cuarto tanteando las paredes y tratando de encontrar sitios en los que sus zapatos no se llenaran de alguna cosa rara de las que habia en el suelo, se detuvo ante la desvencijada puerta, se quedo mirando un largo rato, el cuarto estaba mas desordenado aun que el resto de la casa, centro su vista entonces en la cama y la vio, ella estaba alli, dormida, las sabanas dejaban ver sus piernas, penso en acercarse y robarle unos momentos de amor, pero en ese momento vio unas manchas de sangre seca en la cama. Carajo, – ya le toco enfermarse otra vez.
Hace cuatro meses que la conocia, se encontraron por casualidad en un bar que el frecuentaba muy a menudo, el estaba sentado en la barra conversando con el barman cuando sintio una mirada atravezandole la espalda, giro y la vio, tenía unos 25 años, alta y delgada como una espiga, algo simple para sus gustos, le gustaban las mujeres mucho mas rellenas, algo groseras de forma con aire de matronas griegas, le encantaba verlas sudando debajo de el, ver sus pechos moviendose como gelatinas y ver sus vientres amorfos siempre avergonzados pero firmes y crecientes. Pero ella estaba alli y pensó - Peor es nada, cualquier cosa es preferible a irme solo a casa
La llamo a su lado y le pregunto su nombre.
Abygail le respondio ella. Alguna vez habia conocido a otra Abygail pero, era tan diferente a esta, la otra era gorda, enorme con una boca capaz de zambullirse en lo mas profundo y siempre salir con una sonrisa de triunfo diciendole ¿ya? ¿tan rapido?.
Dios mio que gorda!, Sonrio al recordarla y sintio tremulaciones en el vientre.
Empezaron luego a conversar, ante la mirada indiscreta del barman quien de vez en cuando soltaba unas risas hipocritas y confidentes. Ella le contaba cosas de su vida, su trabajo, problemas, gustos, le dijo ademas el motivo por el cual se encontraba en ese bar tan extraño para ella pues no habia casi mujeres y todas le parecian desagradables y algo putas.
Me siento sola, perdida, vacia le dijo ella.
El solo la miraba, miraba sus ojos negros de animal herido, sus delgados y casi inexistentes labios, sus pechos de boton, sus piernas languidas, le importaba un carajo todos sus problemas y demas. Luego sintio una sensación de vertigo y algo que le quemaba el vientre.
Se encontraba ya preparado para el acto sexual, el recuerdo de la gorda le habia afectado-ya es tarde no crees?, quieres ir a algun otro lugar? – le dijo.
A las tres de la mañana salieron del bar, ella hablaba sin parar, el iba ensimismado en sus pensamientos, de vez en cuando escuchaba todo el soliloquio de ella... Porque carajos habla tanto esta tipa? – penso.
Fingio interesarse por todo cuanto ella decia, cuando realmente en lo unico que pensaba era en esa sensacion quemante que ahora recorria de arriba abajo todo su cuerpo.
La llevo a su casa, luego a su cuarto, ella se dejo llevar sin decir palabra.
Esta chica fue demasiado facil – sonrio el; hubo un momento aun de indecision, de pena mientras los dos se desvestian y se preparaban para el acto, luego el recuerdo de la gorda... Ella se lo busco no?.
Fue algo rapido, con no mas sobresaltos que los gritos de ella y los espasmos de el, luego la mirada de rencor que ella le lanzo al verlo levantarse e ir al baño, cuando el regreso mintio y le dijo: Fue una buena cojida – Si... dijo ella mintiendo tambien.
Desde ese dia ella regreso cada noche, y cada noche se repetia la misma escena. El se fue abandonando al amor y un dia no permitio que ella se fuera mas. Aun asi a el le molestaba su voz, su cuerpo, su vida, sin embargo siguieron juntos, le parecia tan vana, tan vacia... pero no podia estar sin ella. Sentia tanto odio por no poder acabar con eso y a la vez tanto amor al verla dormida.
Ella salia todo el dia y solo regresaba en la noche, casi siempre con marcas de agujas en los brazos y un fajo de billetes en la bolsa. El esperaba desde que la veia partir y aun en el trabajo la esperaba y al llegar a casa en la tarde la esperaba aun mas. Sin hacer o pensar nada mas que en su regreso y en su anorexica y lastimera figura. Se dio cuenta pues que su vida hasta ese momento habia sido tan solitaria. Habia estado solo tanto tiempo y ahora no podia soportar su ausencia ni un par de horas; que vida simple y vana he vivido... que raros los hilos que nos manejan cual marionetas en un circo en el cual todos somos los mascaras de caras sonrientes pero que se sienten igual o peor que yo -dijo mientras estaba sentado cabilando en un rincon de la casa.
Lo que lo encabronaba era que sol hastas ahora se habia dado cuenta de todo, solo ahora notaba lo solo que estaba, vivia rodeado de tanta gente y sin embargo habia conocido a alguien de verdad? le habia preocupado alguien a excepción de el mismo? He intentado acercarme? Siempre solo- se contestó.
Y comenzo a desvariar entre un universo abstracto y uno de verdad; entre cosas que van y cosas que vienen y en el camino no se detienen (Soy poeta y en el aire las compongo). Con una existencia a medias. Apreto el puño intentando pensar en la gorda... seria mejor olvidar toda aquella mierda, pero no era facil, nunca lo habia sido, sin embargo, siempre lo lograba, habia logrado olvidar cosas que lo atormentaban, recordandolas quizas como sueños, pesadillas, perdiendose en un mundo de irrealidades, hasta llegar a no estar seguro de que cosas eran verdad y que no lo era. Empezo entonces a olvidarlo todo, y solo a veces los recuerdos afloraban y confundian su ser. La gorda! Volvio a recordar. Y fue en ese momento que escucho una voz
-y si te deja?
Eso seria un gran problema, por que carajos no regresa ya!, a donde demoniosva todos los dias?
Solo hasta ese momento se percato que ella salia temprano y regresaba tarde, nunca le habia prestado la atencion debida, solo sabia que ella siempre estaba dispuesta a fornicar cada vez que el se lo pedia...
- te va a dejar
...tal vez. pero no hoy! - se respondio a si mismo.
Ella llego mas tarde que nunca ese dia, y el empezaba a pensar que realmente no regresaria mas, sufria, y sentia rabia, mucha rabia pues ella lo hacia esperar sin motivo Que mierda se ha creido esta!... se abrio la puerta y el sintio un hormigueo por todo el cuerpo... se dio cuenta de que estaba llorando.
Se amaron como nunca antes lo habian echo, fue algo dulce, sereno, bruto y salvaje; se dio cuenta entonces que la amaba, amaba a esa mujer que vivia con el ya 4 meses y que sin embargo no conocia del todo. Descubrio esa noche todo sin palabras, descubrio su cuerpo y descubrio algo que hasta ese momento le habia sido negado: poder amar.
En la madrugada desperto sudando, los recuerdos presentes y futuros volvian a el; ella dormia tranquila a su lado... habia soñado que estaba en un teatro en el que el actuaba, era el personaje de un hombre funebre que hablaba del amor, sin embargo cuando salia a escena nadie lo veia ni lo oia, y el escuchaba a la gente gritar y reir sin verlo...sintio nuevamente el hormigueo, penso en despertarla pero desistio.
Fue una madrugada terrible, llena de sobresaltos y crisis que iban y venian dentro de su cabeza, llena de preguntas sin respuesta, de respuestas sin preguntas, nadando en la oscuridad de su cerebro...me dejara.
No pudo menos que mirarla con odio, se pregunto como amaba a alguien que no conocia, pero por quien seria capaz de hacer cualquier cosa.
Dejare de existir si me deja - se dijo, pero era tan cobarde...no tendria el coraje de atentar contra su vida y otra vez el hormigueo esta vez en el estomago, luego la confusion entre lo real y lo irreal, - que tan real es este amor?- recordo entonces que una noche siendo niño habia despertado angustiado, sintio una mano de hombre encima, trato de calmarse, sudaba, volteo armado de valor a responder el ataque y ya no habia nada. Fue entonces que habia comenzado a confundir la realidad. Fue tan real - Habia pensado.
Y ahora esto, sabia que la queria pero, y ella?- trato de pensar en la gorda pero no lo consiguio esta vez. Sudaba y el hormigueo nuevamente, esta vez por todo el cuerpo, su corazon latia cada vez mas rapido y mas fuerte su cerebro saltaba y se perdia en un mar de dudas, sintio que iba a a reventar que le faltaba el aire, se ahogaba y no podia hacer nada. Finalmente desperto.
La encontro durmiendo, tan tranquila como siempre, hoy no ha salido - penso, era temprano aun, empezo a alzar los papeles y demas cosas que cubrian casi todo el suelo, barrio y limpio cada rincon de la casa, por la tarde salio a comprar algo que comer, al regresar vio como la casa habia cambiado, el sol entraba fuertemente por las ventanas, llenandolo todo con su luz, y ella continuaba alli dormida sobre la cama, decidio no despertarla para comer, se sentia feliz, el hormigueo habia pasado.
Y esa sensación de desamparo y miedo que lo habia invadido el dia anterior se habia disipado. Desde hoy todo será diferente, se dijo a si mismo y sonrio feliz.
Mientras, el fetido olor que salia del cuarto empezaba impregnar lentamente toda la casa...
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