Intentado viajar a otra dimensión en une estado mental de vacío, perdida en la inconciencia que consume poco a poco la sensación de impotencia, sobre aquel acontecimiento sucedido no mas de dos minutos atrás, no quiere volver de aquel campo generosamente repleto de ceibas donde cabalga sobre un girasol amarillento cubierto de amapolas con alas blancas de mariposa y garigoles tornasol, queriendo volar, huir, sintiendo dolor en sus débiles piernas huesudas, se da cuenta que han desaparecido esas manchas de sangre seca corrida seguida de marcas dolorosas , comienza a esparcir un líquido càlido y transparente sobre su suave y delicado rostro inocente, sin saber el fin de aquel maltrato constante, enroscada bajo su cama cubierta con un miserable jersey viejo, lleno de colores, sin emitir sonido alguno, pretende desaparecer…