| STEPHEN HAWKING DIVAGA DESDE
 SU ESTADO CUASI-MÁQUINA
 
 
 Un agujero negro no es tan negro
 puedo decirlo con el movimiento
 de mis corneas, puedo asegurarlo
 con el aire, con esa voz robótica
 a la que me sujeto día y noche.
 
 ¿Pero a quién reclamar por mis angustias?
 porque a mi ya no me preguntan nada
 sólo me miran ya como una máquina.
 El cálculo se ha hecho una rutina,
 a veces dedicarme a otras cosas
 añoro, caminar por las veredas,
 abrir ventanas altas una a una
 y también dedicarme a lo doméstico,
 porque extraño lavar mis calzoncillos.
 
 Un agujero negro no es tan negro,
 no necesito más mover mi cuerpo,
 realidad está presente aquí
 mientras el hombre mira lo espacial
 y yo apenas, estático, deseo
 tocar tierra, una diametral sonrisa,
 porque tal vez me mueva por milagro
 y si preguntan yo responderé:
 nadie es feliz sino se burla de uno
 
 
 mismo, y esto lo sabe el universo.
 
 Un agujero negro no es tan negro,
 sobre el big ban yo sé, no lo inventé
 y si dudan pregúntenselo a Dios.
 Porque a estas alturas de la vida
 comprendo que no existen dimensiones,
 ni inicio, ni final. En tanto creo
 que sólo mi sombra es realidad,
 que toda forma es sensatez, también
 que ahora estoy muriéndome de risa.
 
 
 juliofabian9@gmail.com
 Julio Fabián Salvador
 
 |