Si resisto, es por tí,
que aún sujetas mi mano
a mas de mil leguas de
este imperioso lugar,
si dejo que el
silencio me abrace es
porque estas en algun lugar
del mundo,
esperando,
omnipotente sirena
de los siete mares,
porque en algún
lugar tu silbido
mortífago repite
mi nombre de altanera
nodriza de hombres,
porque en mi vientre
crecen de tí,
las palabras regurgitadas
al azar, porque
de tus labios,
de tus ojos,
de tu piel oceánica...

... Nacen los días que mi
vientre maldito
de al mundo.