No sé si has cambiado o definitivamente me niego a conocerte...
Desapareces cuan ceniza de un cenicero y apareces como conejo de un sombrero de mago, odias que te susurre al oído y detestas que te hable mi mano, sinceramente no sé si has cambiado o me niego a conocerte...
Tal vez ya te fuiste, o nunca has estado, juras ser otro y aún no has cambiado, reniegas porque te hablo, pero tambaleas y me llamas cuando ves que me marcho, no sabes ni lo que quieres ya hasta me he enfadado, solo has sido un sueño donde persiste el pecado, mientes miento y me odias, pero aseguras haberme amado, no sé si has cambiado o definitivamente me niego a conocerte…