En la plataforma del contorno
despego cual astronauta
para forjar amada patria
en el labial de tú semblante.
Viajo con los anhelos,
con la tibia sangre,
con una canción enamorada,
con la pasión en los bolsillos.

Es el planeta amoroso
que recibe los pecados
de mis volátiles calzados.
Planeta selvático
de tundra enigmática:
bautizaré cada especie
con las iníciales de tu nombre.

Amada tierra marciana:
en tú regazo edificaré
la zurda morada
que albergará mis episodios.
Ahora dormiré inocente
en tus arboles alienígenas.
Luego, a morder la fruta
que tus sacros terrenos alojan…

Mundo colonizado:
Si viene el Armagedón,
solo escondeme, pero no apagues la luz.