Cuando tu desapareces 
hay palabras que se  
borran de mi  
campo lingüistico, 
 
cuando no estás 
se fugan en  
dolores de  
un por qué 
y dejo de pensar en 
el brillo 
de la luna mortal. 
 
Y de las ánforas 
griegas de la  
lluvia, las ninfas caen, 
 
caen, 
 
se retuercen en ásperas 
malezas de noches 
fugaces, 
se ponen a gemir  
placeres pasajeros, 
 
se ponen a llorar... 
 
... Cuando tu no estás, 
se me olvida el nombre 
de las cosas 
 
Caliope 
 
sientate en el 
regazo de las palabras que 
he aprendido a olvidar, 
 
olvida el nombre de mi  
amado, que mi 
mano entre tus pechos se  
descuelga 
 
y resuena, 
 
resuena el llanto 
cuando gotea contra 
el suelo, 
 
me atraganto con la 
partida de tu cuerpo 
resonando, 
 
y las llamas del cáliz 
de la eterna aspereza se 
disgregan en melancolía, 
se pudren en las manos 
oprobiosas, 
aspiran opio, 
fuman marihuana, 
comen cocaína a  
mordiscos para 
sanar el mal del alma, 
 
vuelan con las aves, 
regurgitan a  
boca de jarro la  
comida a otros peces, 
 
pero vuelan, 
 
resuenan, 
 
cuando el paso 
del tiempo lleva tus manos 
de plástica mentira 
al último confín de  
la parpadeante tierra nuestra.  |