De pronto me acosté
con una sonrisa en los labios,
Y empapada
De una irónica tristeza
Ahí donde sólo uno lo siente.

Era una vez más la vida
Que termina y a la vez empieza
Que duele y cura
Que mata y vive.

Sin darnos cuenta
Nos vendieron la primera fila
de esta platea intrascendente,
Desde dónde vemos a la melancolía
Actuar con nuestros rostros,
Invitándonos a degustar….
La angustia de no encontrarnos,
De no vernos
Un día cualquiera.

Y nos jugó en sólo tres actos
El final de la historia
De un destino incierto y marcado
Que no sabe
De perdones y pecado

Cierra el telón
Que nuestra comedia romántica
Trágica ha caído
No sé que duele más
Si amarte en silencio
O morir en el intento.