Ayer me vestí de cerdo
abrí el estómago hasta atrás
calaveras, municiones, una selva
y blasfemias para eyacular

Vandálico en la calle, acá dentro…
rumiante tenebroso temporal
Pintarrajo de tu credo en mi miembro
de intensas maneras de incendiar

Fermentaron los venenos que yo llevo
para darle el bajo a la sobriedad
ahora meto cizaña y me apesto
si no voy ebrio me haces falta más

Porque admiro las palabras insolentes
confundo la gloria con mi suciedad
esta plasta de espíritu que tengo
puede solo amar, culpar y acalorar

Puesto en guardia, centinela incompetente
y conmovedora pose de cristal
cotorreo que desarmo de hace rato
y tanto me cuesta desacelerar

En mis pasos no se entiende lo que valgo
cuando demando tajada del barrial
es que pierdo la putita cantinela
aquilatado no soy vendaval

Pero, escucha, nena, yo te debo todo
empalagado fui a escarmentar
pospuse este manojo de infecciones
siete milenios, me esperará

Y tú nunca quieras, linda, distanciarte
de este lascivo y blanduzco haragán
que en mis huesos he copiado ya tu nombre
y luego borracho no se borrar