cierto día entraron a la selva tres hormigas citadinas, y como allá se ve tanta chatarra televisiva y se lee tanta trivialidad en internet, en revistas y periódicos; una decía llevar traje de versace, zapatos jimmy choo, bolso prada y lentes dior
su compañera dijo portar falda dolce galbana, blusa alexander moqueen y zapatos fendi,
la mas relajada de ellas, decía lucir jeans juicy couture, camiseta ralph lauren, bolso chanel y lentes deportivos gucci,

saludaban de beso en mano a quienes pasaban por su lado, hasta que un sapo orondo, muy tieso y muy majo, cruzó el camino y las detuvo, el gallo que viajaba raudo en cuatrimoto, hizo alto al verlas y el caimán, que tenía grabadora “picó”, la encendió

desde ese día, las tres hormigas pasan en abarcas con mochila “rayá” y pantalón corto desteñido
cambiaron los valses , el jazz y los blues, por paseo vallenato de acordeón con ron y de cuba el son
el sapo toma clases de glamour, la lora de mambo, merengue y boogaloo ,
el gallo ya no canta en madrugada, sino después de medio día, cuando pasan las tres alegres comadres, sin disfraces y en todo su esplendor

entonces, ya no les dicen “las bandidas esas”, sino “paisanas” o “mi amor”