TU COMUNIDAD DE CUENTOS EN INTERNET
Noticias Foro Mesa Azul

Inicio / Cuenteros Locales / La_Columna_del_Miercoles / El ADN de los textos literarios

[C:448847]

Corre el rumor, Fidentino, de que recitas en público mis versos, como si fueras tú su autor. Si quieres que pasen por míos, te los mando gratis. Si quieres que los tengan por tuyos, cómpralos, para que dejen de pertenecerme.” (Epigrama XXX: A Fidentino el Plagiario)



El plagio literario ha sido desde los tiempos más antiguos preocupación para todo creador. Generalmente surgen opiniones encontradas cuando se trata de juzgar la actividad de quien comete plagio, incluso ha llegado a ocurrir que la obra plagiada adquiere un altísimo nivel hasta ser considerado en sí mismo una valiosa creación

Son innumerables los casos de escritores famosos, de todos los tiempos, que han sido acusados de plagio. También existen muchas maneras de plagiar, o sea, de hacer pasar textos ajenos como propios. Se dice, por ejemplo, que Alejandro Dumas, novelista y dramaturgo francés, contaba con una treintena de colaboradores, quienes le ayudaban a escribir sus obras.

Stendhal, escritor francés considerado uno de los literatos más importantes y más tempranos del Realismo, fue acusado de plagiar.

Del mismo William Shakespeare se cuenta que existe una versión similar de Hamlet, aparece en el libro de un historiador danés del siglo X conocido como Saxo Grammaticus. El texto cuenta la historia de Amleth, Príncipe de los daneses, cuya trama resulta sospechosamente similar a la obra del dramaturgo de Stratford-upon Avon.

Entre los casos más recientes, a Dan Brown se le acusó de plagio, fueron los autores de un estudio llamado "La Sangre Sagrada y el Santo Grial". A José Saramago lo acusó de plagio el mexicano Teófilo Huerta. De acuerdo con la demanda, "Muerte con interrupciones" es una copia de su historia "Últimas Noticias", que forma parte del libro "La muerte segunda".

Sería interminable la lista de autores famosos que han enfrentado cargos por plagio. Lo interesante es que hoy en día se comienzan a cerrar las posibilidades para que un escritor pase como suya una obra ajena sin ser descubierto. Resulta que así como cada persona tenemos nuestro ADN único, irrepetible, se ha descubierto que cada obra literaria también lo tiene impreso, es la huella del autor. La Columna del Miércoles comparte esta semana con sus lectores el siguiente artículo con la esperanza de que resulte de su interés. (borarje)



Encuentran la huella literaria de los escritores


Un equipo de físicos suecos ha descubierto una fórmula para detectar una "huella" literaria que permita distinguir los textos de los escritores. La técnica, cuyos detalles se publican esta semana en el New Journal of Physics, se basa en el análisis estadístico de las palabras nuevas que van introduciendo los autores en sus obras.



Un grupo de investigadores del Departamento de Física de la Universidad de Umeå (Suecia) ha analizado las obras de Thomas Hardy (autor de Jude el oscuro), D. H. Lawrence (El amante de Lady Chatterley) y Herman Melville (Moby-Dick) para desarrollar una formula estadística que permite encontrar las huellas literarias que los distinguen.

Los científicos publican hoy en el New Journal of Physics un estudio en el que introducen un nuevo concepto denominado “meta-libro”, en el que usan la frecuencia con la que los escritores emplean palabras nuevas en sus obras para encontrar patrones diferenciadores en sus estilos de escritura.

Hasta ahora, y desde hace más de 75 años, se tomaban como referencia los postulados del filólogo estadounidesnse George Kingsley Zipf que, en base al análisis de una compilación de textos en inglés americano denominada Brown Corpus, sugirió la existencia de un patrón universal en la frecuencia con que los autores usan palabras nuevas. La ley de Zipf señala que el ranking de frecuencia de una palabra es inversamente proporcional a su aparición, es decir, que un pequeño número de palabras se utilizan mucho, mientras que un gran número apenas se emplean.

Pero las nuevas investigaciones sugieren que la frecuencia de las palabras es menos universal que lo que indica Zipf, y que tiene más que ver con la habilidad lingüística del autor que con cualquier otra regla del lenguaje.

Los físicos suecos encontraron que la aparición de nuevas palabras en los textos de Hardy, Lawrence y Melville decrecía a medida que sus libros eran más largos, y a pesar de que describieran nuevos escenarios o hubiera giros en el argumento. Además descubrieron que la disminución de la tasa de palabras únicas variaba entre los diferentes autores, y lo que era más significativo, esto sucedía en las obras completas de cualquiera de los tres.

El análisis estadístico se aplicó tanto a las novelas enteras como sólo a partes, así como a trabajos completos o recopilaciones de varias obras realizadas por estos autores, y en todos los casos aparecía una huella única con las frecuencias de las palabras.

El meta-libro, el gran libro madre

A partir de las evidencias que mostraron los modelos estadísticos los investigadores han introducido la idea del meta-libro, un código para cada autor que podría representar toda su obra, completa o que tuviera en mente.

Los científicos concluyen que este descubrimiento “nos dirige hacia un concepto de meta-libro en el que la escritura de un texto puede considerarse como un proceso donde el autor extrae un fragmento de texto de un gran libro madre (el meta-libro) y lo pone en el papel. Este meta-libro sería un infinito libro imaginario que representaría las frecuencias de las palabras de todo lo que un determinado escritor podría pensar jamás en escribir.


Fuente: Servicios de Información y Noticias Científicas (SINC) http://www.plataformasinc.es/index.php/esl/Noticias/Encuentran-la-huella-literaria-de-los-escritores


“El que desea adquirir la gloria recitando versos de otro, debe comprar, no el libro, sino el silencio del autor”. (Epigrama LXVII: Contra un plagiario de su libro).



Texto agregado el 07-04-2010, y leído por 276 visitantes. (9 votos)


Lectores Opinan
08-04-2010 Muy interesante, amigo. Nunca he entendido cómo alguien prefiere perder tanto tiempo plagiando, en lugar de gastar éste, creando. Me gustó mucho el contenido del artículo y la reflexiva introducción que haces, Borarje. Gracias, nuevamente. Un abrazo. Sofiama
07-04-2010 ¡Qué aporte, pero qué buen aporte! Eso sin contar con el estilo, es decir, la línea estilística (huella dactilar) del escritor. Porque uno no puede saltar como pulga, de estilo en estilo. Eso se va conformando, pero a muy temprana edad en el ejercicio de escribir, se llegue a la cumbre o no. Un escritor tiene, por encima de los gustos personales del lector, un estilo propio, sí es un verdadero escritor. Perfecta ocasión y aporte para distinguir si hay madera noble o, en cambio, es un aglomerado. En cuanto a los distintos géneros literarios, nos encontramos, que sólo el poeta es capaz de escribir cualquier otro género literario, y no al contrario. Y con mi agradecimiento por este aporte, mis felicitaciones, con sus estrellas, que brillarán aunque sólo quede una. maravillas
 
Para escribir comentarios debes ingresar a la Comunidad: Login


[ Privacidad | Términos y Condiciones | Reglamento | Contacto | Equipo | Preguntas Frecuentes | Haz tu aporte! ]