Amiga Fridilla te prometí una visita, pero creo que no nos encontraremos aquí,

Tu casa está ahora llena de admiradores que tú no puedes saludar,

Eres magna aún viviendo en el cielo o en el infierno,

Es dulce tu inocencia y tu bailar ingenuo,

Y aunque muchos te utilizaron y otros se burlaron de ti,

¡Perdónalos son ignorantes que jamás entendieron tu lenguaje fraseado!

Hasta la misma vida atropelló tus sueños y tu cuerpo se llenó de dolor agudo, igual que el mio.

Bruja, loca, prostituta, te gritaban en silencio los saboteadores,

Revolución a cuestas, marejadas de odios y ríos de hiel corrían a tu lado.

Mis noches en blanco, palabras perdidas en las tinieblas de la angustia,

Tus noches perdidas entre óleos y pinturas que al juntarlos seria arte.

En eso fuimos iguales.

Mis ojos pegados a tu imagen y a tu recuerdo no
me dejan dormir,

¿Será el final mi destino igual al tuyo con un elefante al lado?

Tu sufrir y el mío mezclados con tequila y chile se
vuelven enigmáticos en el campo de los muertos.
Mi confianza en la gente se perdió como se perdió la tuya en los que decian que te amaban.

Traición y mentiras juntas para pisotear tu cuerpo enlodado.

Pero es un secreto que me llevaré a la tumba.

Adiós y este adiós es temporal por que ya siento el día de las flores negras.