Ganas de morderte le dijo al oído...
y ella bajo la mirada sonrio,quiso hablar de otra cosa

distraerlo con la platica de el nene en el colegio,pero el se planto
tan cerca de ella...no había nada mas que verlo,lo sintió, su calor, la mezcla de olores que desprendían el cuerpo, el casimir, la loción de maderas,el brazo que le pasaba por la espalda.... Intento echarse hacia atrás para mirarle a los ojos,
pero el los cerro a besos y luego le rozo los labios
y ella sintió que se ahogaba y que un fluido tibio la envolvía,
que la piel comenzaba a arder,la sagre iba a brotarle por los poros
mientras el le besaba las mejillas,las orejas, el mentón, la nariz,
y ella gemía o ronroniaba bajito,se atragantaba, se humedecía,
y el insistia con la barbilla alzándole la cara
,besandole los párpados, los labios emperpurados
,la nuca, los hombros,la comisura de esos labios carnosos muy suyos!
, murmurando de nuevo...ganas de moderte¨ ,
tal vez solo pensándolo o sonando lo
, pero buscando la forma de ganarle el mentón con la nariz,
de empujar hacia arriba mientras ella dejaba caer la cabeza
como arrastrada por el peso de la cabellera,
entreabría los dientes, asomaba la lengua,
ella emitía un estor de gozo,con esa mirada felina que tanto la caracteriza...
y el como un torero exponía a aquello firme, clavaba los largos colmillos,sentía escurrir la sagre,ausente del espejo, tembloroso de amor...
Y la noche se alargaba y el silencio se estremecía al escuchar
los gemidos que emitian los dos...