Cuanto tiempo ha pasado
desde la última vez que
nos vimos para nunca mas
volver a encontrarnos.

Y tras esa cortina
de tiempo, en medio
de todos los recuerdos,
aparece esa mujer.

Una que al verla
me hace pensar más
en ti, por ser
físicamente similares.

Veo en ella toda esa
delicada estructura
que hay en ti,
de pies a cabeza.

Te miro en ella,
por su cuerpo esbelto,
su cabello castaño
y sus ojos negros.

Por sus finos brazos,
sus alargadas piernas,
sus pequeñas manos
y sus delicados pies.

Tan solo su piel morena,
a diferencia de la tuya
que es blanca,
es lo que no coincide.

Una noche, bailando
con ella, imaginaba
que eras tu mi pareja,
con quien siempre quise bailar.

Pero a pesar de todo
en esa muchacha
también hay grandes
diferencias.

Las dos son como estrellas
inalcanzables para mi,
ella, por estar tan cerca
como es Sol, me puede
destruir por completo
y tú, por estar tan lejana,
tan distante, nunca
pude alcanzarte.