Somos hojas del camino

Viandantes sin destino,
a veces somos hojas
que deambulan sin rumbo
por el paisaje agreste

Restos de algo bonito,
recuerdos de una vida fértil
abono, desperdicio, viajantes perdidas.

O somos el rastro que deja una buena brisa
que indica al viajero hacia dónde ir.

Somos -y no- parte de algo,
parte de nada
en camino inexorable a la muerte...
... ¡o a la resurrección!