UNA LECCIÓN DE VIDA

En estos meses mi ausencia me dejo una lección muy importante, al verme en una situación delicada pues la enfermedad se hizo presente a mi puerta, acompañado de angustia, dolor, desesperación, y falta de dinero, me preguntaba como salir de esta situación, y cuando me encontraba en la Emergencia del Hospital, me vi rodeada de varias personas con la misma problemática pero una en especial se me acerco y me dijo, ya no llore, no se preocupe, su mal es una bendición, pues cuando ya estamos aquí y muy delicados de salud, es cuando nos acordamos de Dios, y sabe que el esta aquí a un costado suyo, y el sabrá si sanarlo o llevarlo de la mano con el, pídale y el le escuchara y le dará.
Y me dijo yo le pedí, que mi hijo ya no sufriera y el me escucho, yo le pregunte si su hijo ya estaba bien y el me dijo no Dios se lo llevo. y ahora ya esta bien. Esto me enseño a que aunque estuviera falta de muchas cosas y con preocupaciones, tenia la esperanza de salir con vida de la Emergencia y por eso le doy gracias a Dios y a esta persona por darme aliento a salir adelante y a dar gracias todos los días por permitirme vivir. GRACIAS DIOS.