Galletano Veloso


Galletano Veloso; joven jovial del barrio industrial, veloz comedor de galletas.

-Gordo insensato, te vas a reventar- le dijo su novia un poco antes que este, comenzara a masticar.

Comió cuan rápido pudo, tragó como un embudo y a final de mes, ya no tenía un cinco que gastar, en galletas para tragar.

Triste figura, lánguido pasar ¿que será de Galletano? ¿se debería endeudar?

-Sí – le respondió la vendedora –es preferible vivir contento, que con cara de animal–.

Comenzó otra vez Galletano, en el trabajo pidió horas extras, para así comer las galletas, que le permitieron ostentar, el estilo de vida que el creía, merecía llevar.

Terminó y es triste de aceptar, Galletano Veloso el joven jovial del barrio industrial, embarrigado en su palacio fastuoso, agobiado por las deudas, el exceso de galletas y del que dirán, ciego a la realidad y sin estimar las consecuencias del triste final, que es perder las riendas, del ser liberal.