Malditas todas ellas, sanguijuelas rastreras, basura disfrazada de necesidad, esclavistas de los embaucados, amarras de alambre y de púas oxidadas, tramposos y timadores, portadores de peroratas virulentas, empresas mezquinas de la estafa, antro de ambiciosos ampones, ladinos trasquilando la inocencia de la gente, son la medusa mecánica del dólar, son los brazos necróticos del capitalismo.
Tentáculos viscosos de la amargura, Las líneas grises mascullando con sus gusanos voraces de la avaricia y las redes que van drenando sangre y babas a cambio de dinero, confrontando al peruano con el chileno, al boliviano con el argentino, causando el odio entre hermanos sin dar la propia cara, orquestadores del insomnio y la locura de la dependencia, marranos enriqueciéndose del chantaje, atropelladores y burlones, engatusadores de los créditos, inmorales de manos negras, explotadores de trabajadores y de consumidores, monedas negras, zánganos de la miseria, oradores de pústulas en las lenguas… empresarios pestilentes, de inescrupulosos torrentes de corrupción…
Que se marchiten sus garras pútridas, que el aguijón de la plaga se reviente en sus barrigas y se hundan con toda sus maquinarias de cables ópticos, en ese fango de bilis y carne muerta, que se aferren a vuestras gargantas las redes y los asfixien como a gordos perezosos, con sus bocas atiborrada de billetes, por todos los asfixiados que están esclavos del egoísmo del poderoso, y que la fiesta se termine en ustedes mismos, en el mismo baile incontrolable, condenándolos espasmódicamente, hasta que se les rompan los huesos y se desgarren sus músculos inútiles y que se acabe la fiesta de todas las empresas, y que sus secuaces mueran llenos de gangrena.
Con ello llegara el triunfo insolente, irreversible de los oprimidos, de los seres prostituidos del sistema, al final de la fiesta, a la muerte fulminante de la globalización capitalista.
Entonces el hombre libre y sus manos embrutecidas, romperan la rutina del mundo y jusgarán sin temor, con la condena de fuego indeclinable, cada una de sus violaciones,todos sus robos y toda la miseria y todas sus cadenas.