EL GATO AMARILLO.



A tiempo de mi retiro poseía tres acres de tierra ubicado a unos quince Kilómetros de la ciudad donde viví por mas de cincuenta años. El terreno estaba ubicado al final de una calle sin salida y que solamente tenia pavimentado unos cuarenta metros ; el resto era tierra aplanada y en tiempos de lluvia los automóviles no podían transitar pues corrían el riesgo de quedar atascados en el lodo . La casa del vecino mas cercano estaba a unos docientos metros de distancia , pero, así y todo yo me sentía feliz.
Después de instalar mi “trailer”, construir mi fosa sanitaria, mi pozo de agua y, tener la suerte
de que el ultimo poste del tendido eléctrico quedara frente a mi propiedad , no tuve ninguna contrariedad para que la Compañía me instalara el reloj contador.
Rápido me acomode en mi “propio” mundo. Mi hornilla eléctrica , una pequeña nevera, una cómoda cama, un viejo televisor y mis libros eran mis objetos mas valiosos . ¡Una literal soledad! Dueño absoluto del resto de mi vida y de mis actos .
En la primera semana mi actividad fue sorprendente, frente a mi “tráiler” sembré flores,corte y arregle el césped ,moví y recogí las piedras que estorbaban y coloque mi buzón postal . Para la segunda semana de mi retiro contrate los servicios de una Compañía para que,alrededor de mi “trailer” , construyeran un porche forrado de tela metálica contra los mosquitos . Compre una cómoda y vistosa hamaca nicaragüense y dos amplios butacones, de madera tropical estufada de atractivo color natural rojizo, para colocarlos en mi flamante recién terminado porche.
Un poco mas de un mes tardo la completa instalación a mi nuevo “paraíso” . Mi retiro comenzaba : soledad,silencio,tranquilidad...despreocupación ; todo lo que necesitaba para dedicarme a leer los innumerables libros que había seleccionado para este mágico momento de mi vida....descansando de tantos y tantos años de trabajo, de tedioso trabajo, como auditor financiero de importantes entidades comerciales.

En realidad no se, ni entiendo , como mi “paraíso” Se fue esfumando como un espejismo . Llego a tal extremo mi solitaria ociosidad que pasaban días en que ni tan siquiera lavara mi cara; mi canosa y enmarañada barba y mi pelo crecían sin control y si antaño mi reloj biológico hacia que me levantara de la cama al amanecer, la nueva costumbre de quedarme dormido apenas comenzaba a leer uno de mis favoritos libros , lo había descontrolado.. No solo el sueño estaba descontrolado ; también mi apetito lo estaba.
En una de las esporádicas visitas de mi hijo me expreso su preocupación al observar lo demacrado y avejentado de mi aspecto , el desorden de mi casa y, según El, hasta mal olor había en mi cama.
A mi nieta de diecisiete años se le ocurrió la mala idea de que lo que yo necesitaba era un animalito para que me hiciera Compañía y mi hijo me insinúo que necesitaba volver a casarme.
¡ Gano mi nieta..! A la semana siguiente me trajo , lo que ella dijo era, un “gran” regalo
¡ Un gato..! ¡ Un maldito gato ! Una pequeña y oscura bola de pelos con ojos y boca que no cesaba de emitir agudos maullidos cuando sentía que no había nadie a su lado.

Acepte “aquello” por no contrariar a mi nieta pero mi repulsión por los gatos y perros venia desde mi casa paterna ; mis padres jamas soportaron los pelos de los gatos ni el mal olor de los perros en su casa.

Resulto ser una gata con suerte . Le coloque un cajón de madera con una vieja alfombra en mi porche para que durmiera mientras yo,en mi hamaca me recostaba y disponía leer uno de mis libros . Apenas ya surgía mi letargo cuando la dichosa gata comenzaba a maullar ; mi nieta me había “instruido” : Tenia que preparar la leche especial de gata a temperatura ambiente , colocarla en un diminuto pomo con su diminuta tetera y dársela ,como a un niño, a la condenada
bola de pelos...con ojos y boca. La bola de pelos se quedaba tranquila ,Después de “tragarse”
toda la leche , para comenzar con sus estridentes maullidos tan pronto se sentía “sola”.
Llame a mi nieta (que se extraño mucho de que yo llamara) para preguntarle de aquella rara actitud de la condenada gata y me explico .

— Abuelo lo que pasa es que es una gatica de poco mas de un mes y extraña a la madre...ella necesita sentirse acompañada ...
— ¿ No seria mejor que te la llevaras y me la trajeras cuando ya no grite tanto.? — Le dije con la esperanza de deshacerme definitivamente del dichoso animal.
— ¿ No la quieres abuelo..?
— ¡ No..! No,si la quiero....es que llora mucho — Mentía lo que mas quería en el mundo era que el animal desapareciera de mi vida.
— Abuelo no te preocupes, eso se le quita a medida que crezca... — Me contesto feliz.

Si; la dichosa creció,pero ya mis siestas en mi porche nunca mas fueron iguales. Nada mas entraba al porche y la gata se me enredaba en las piernas pidiendo leche , o si no tratando de escaparse al patio, cosa que no podía dejarle hacer para que no me trajera pulgas u otros “bichos”
Esto, lo de no dejarle salir, mi nieta no lo sabia ; en las llamadas, casi diarias, que ella me hacia para averiguar por la seguridad y salud de su “famoso” regalo ; me instruía sobre el cuidado de los felinos y en especial de “Bola de Pelos” que fue como bautice a la gata.
Cuando le comente que Bola de Pelos apenas tomaba leche y que se pasaba todo el día durmiendo nerviosamente me urgió a que la llevara al veterinario.

Cuando,cargando con la dichosa gata,llegue al pueblo , lo primero que hice fue pasar por la peluquería ; mi aspecto llamaba la atención ,parecía un ermitaño por mi pelo largo y mi gran y descuidada barba. Busque la dirección del veterinario , que mi nieta me había facilitado, y allí me senté a esperar mi turno junto a las otras personas que también cargaban a sus mascotas.
El veterinario resulto ser una veterinaria . Mujer menuda de piel blanca y cuidada,abundante cabellera , muy femenina y muy activa para sus...¡Bueno ! para sus años.

— ¿ Que síntomas presenta la gatita..? — pregunto de forma amable pero muy profesional.
— No quiere comer y duerme mucho..y la veo muy débil..— Me sentí un poco estúpido ,pues en realidad si yo estaba en aquella consulta no era precisamente por el estado de salud de la “dichosa” gata lo hacia para tener contenta y tranquila a mi nieta.
El resultado demostró mi incompetencia y falta de cariño hacia el animalito . Bola de Pelos tenia ya cinco meses de edad y hacia mucho tiempo que tenia que cambiar la dieta de leche por una comida mas solida . El felino necesitaba tomar el sol o sea salir al patio a jugar y cazar.
Esther, así se llama la veterinaria , me dio todas las recomendaciones por escrito y presilladas a ellas,una tarjeta de negocios donde aparecía su nombre y su numero de teléfono. Me entere que Bola de Pelos era una gata de raza Maine Coon, única nativa de los Estados Unidos.
A causa de la comida de Bola de Pelos comenzaron nuevas obligaciones ; la compra de la comida adecuada y recomendada por Esther , si, la veterinaria , pero por su costumbre , según ella, de llamar a los dueños de sus pacientes para saber de ellos y por la frecuencia de sus llamadas ya no le digo doctora...
Decía que la comida de la “dichosa” gata trajo a mi tranquilo retiro nuevas obligaciones . Primero la selección por la textura y cantidad de nutrientes ,contando siempre con el gusto de Bola de Pelos ; el plato, el distribuidor de agua y lo mas importante... ¡ Sus paseos al sol..!
A Bola de Pelos le encantaba el agua (yo siempre creí que los gatos la odiaban) y cuando bebía del distribuidor creaba un tremendo reguero pues la tomaba de su zarpa , ademas de sus juegos chapoteando en el agua que botaba en el piso.
En pocos meses la gata desnutrida y flaca se transformo en un hermoso animal ; de abundante pelo grueso ,largo en su estomago y los miembros posteriores y mas cortos sobre sus patas delanteras . Con una combinación de anchas franjas negras sobre un pelaje menos oscuro y con un vistoso collar de pelos alrededor de su cuello .
Una de las mas molestas obligaciones era sacar y acompañar al animal en sus obligados paseos al sol, recomendados por Esther, controlados por mi nieta y exigido por la condenada gata.
Comencé con cortos paseos al sol de la mañana y, mientras la gata curioseaba y jugaba con los insectos que pululaban en el patio yo me entretenía observando los pájaros que ,en la primavera, poblaban los arboles de mi propiedad.
A medida que Bola de Pelos perdía el miedo a los laberintos formados por la vegetación y el césped sin cortar , los paseos fueron mas largos en tiempo y todo el espacio de mi ya pequeño terreno. El ejercicio nos habría el apetito; Bola de Pelos me guiaba hacia el porche para que le diera su ración y yo corría a mi pequeña cocina e “inventaba” suculentos platos.
Esther me sugirió que dejara a la gata salir sola y que le preparara un lugar para que ella jugara cerca de la casa , así lo hice,solo que temiendo al regaño de mi nieta si la dichosa gata se perdía o se la robaban, yo también salia a pasear . Cuando me acostumbre a que la gata no se extraviaba y siempre regresaba , construí una pequeña apertura en la puerta de entrada a mi “compartido” porche para que ella saliera o entrara cuando quisiera .
Por causa de esa libertad otorgada a Bola de Pelos comenzó otra obligación en mi “tranquilo” retiro : La entrada en escena de el gato amarillo.

Ya había notado que la comida del plato de Bola de Pelos se terminaba demasiado Rápido .
La gata nunca comía tanto y nunca volvía a repetir de sus propias sobras, no obstante el alimento desaparecía dejando el plato limpio. Entonces piense que algún animal extraño entraba a mi porche por la apertura y se estaba alimentando de la comida de Bola de Pelos . Ese día me puse al acecho y descubrí, para sorpresa mía , que Bola de Pelos miraba complacida como un sucio gato amarillo devoraba plácidamente la comida que yo había servido para ella .
Salí al porche gritando y gesticulando , el gato amarillo, con una agilidad increíble, salto por encima de mis butacas y salio por la apertura de la puerta perdiéndose en la vegetación . A partir de ese día comenzó ,para mi, el “juego” de la caza del gato y...Después de todo, ¡ También para el sucio gato..!
De nada valieron los sustos que le di , las piedras que le tire , los ruidos que le hice . El cabrón gato me vigilaba , me estudiaba ; el sabia de mis movimientos dentro del trailer , el conocía todos los ruidos, incluso los del silencio de mis pasos callados.
Como no podía alcanzarle con las piedras y los diferentes objetos que le tiraba, decidí comprar una escopeta .
Una “66 Powermaster” calibre .177 (4.5mm) que ya traía incluida una pequeña mira telescópica.
El vendedor me enseño a usarla pues yo nunca había tirado con arma alguna y me explico que la potencia de tiro estaba en proporción con la cantidad de veces que “bombeara” la escopeta, pues esta funcionaba con el aire comprimido por la bomba y que el rifle alcanzaba su máxima potencia a los diez “bombazos”.
Ese día visite la clínica donde trabajaba Esther y fuimos a almorzar juntos. Como siempre hablamos de gatos y ella me presto un libro sobre su crianza . No le mencione la compra de la escopeta ni el uso que pensaba darle.

Nos vigilamos; nos estudiamos...supongo que el hambre lo venció y con mi reciente adquirida puntería y gracias a la mira telescópica , acerté darle sobre su amarillo lomo .
¡ Salto casi un metro en el aire..! No maulló, solo corrió hasta perderse mas allá de los limites de mi propiedad . Aquel día no volvió , ni al siguiente. Me sentí avergonzado de mi traicionero ataque . Piense que cuatro “bombazos” habían sido muchos y que el animal no sobreviviría . Me pareció que Bola de Pelos esperaba, al igual que yo, verlo aparecer.

La comida volvió a esfumarse , sentí indignación y alegría ,sentimientos mezclados creando a la vez otro mas vivo y estimulante...¡ Cabrón gato...!
Comenzamos a estudiarnos ; yo calculando los ángulos de tiro y el buscando y detectando de donde salían mis disparos . Cambie los horarios del suministro de alimentos y, el animal recibió sobre su amarillo lomo un impacto de...¡ “Seis bombazos” ! No me dio tiempo de observar la reacción del gato ; fue tan Rápido en su fuga que solo vi una mancha amarilla que se desvanecía dentro de los verdes arbustos . Bola de Pelos parecía complacida de mi lucha contra el gato amarillo ; ella observaba plácidamente, limpiando sus extremidades delanteras con su áspera lengua , nunca detecte en ella ninguna señal que definiera de que “bando” estaba, solo parecía estar satisfecha y complacida.
Mi guerra contra Bastet...Así bautice al gato amarillo pues es un gato Abisinio y, según los expertos, es la raza de gatos mas parecida a la “Diosa Gata’ de una ciudad del delta del Nilo en tiempos de los Faraones del antiguo Egipto. Según su leyenda era la guardiana de la casa , peligrosa como defensora de sus hijos ; representaba a la abundancia , el amor maternal ; era la que protegía a los gatos y simbolizaba la fertilidad del sol.
Bastet tiene el pelaje como de una liebre de un color amarillo-rojizo , con unas lineas oscuras que van desde los ojos a las cejas y las puntas de las orejas son oscuras también . Los Egipcios tenían un gran amor y respeto por los gatos. Pasteur dijo que era uno de los animales con menos bacterias y que no tienen mal olor ; Edgar Allan Poe tenia una gata llamada Catterina . Pablo Picaso también tenia una gata como mascota ; a las mujeres del antiguo Egipto le sirvieron las gatas como inspiración para la pintura de sus ojos y, a mi, tanto Bola de Pelos como Bastet han significado la interrupción de mi solitario y tranquilo retiro..

Mis visitas al pueblo se han hecho frecuentes , unas veces para visitar a Esther con Bola de Pelos y otras para comprar víveres y...municiones para mi guerra.... ¡ No siempre le acierto al cabrón gato.! Hoy vine a comprar una maquina cortadora de césped para limpiar todo mi terreno y no dejar ningún escondite al gato amarillo . Aproveche y almorcé con Esther , le hable de Bastet ; por supuesto no le conté nada de nuestra guerra, Después de todo no puedo admitir que el dichoso gato sea mas inteligente que yo . Le conté de la desaparición de la comida , que lo asustaba tratando de que no volviera y de su insistencia en molestarme . Esther disfrutaba de la conversación ,ella era experta en gatos y sabia mucho del carácter de los “abisinios”. Me explico que estos gatos posee una mezcla de ternura,curiosidad y fortaleza , que eran animales muy activos ,extremadamente limpios y unos excelente trepadores . Ella se extraño porque sabia que a estos gatos no les gusta merodear ni alejarse mucho ; considero que Bastet era un gato extraviado porque ellos son muy asustadizos y pueden perderse al intentar huir de un ruido o cualquier situación extraña .
Con la limpieza de malezas de mi propiedad descubrí un grupo de arbolitos de Cherries Salvajes con sus frutas rojas y dulces ,dos arboles de ciruelas , un pequeño pero fecundo Mango, tres Cocoteros cargados de semillas y uno de grandes y sanas guayabas con sus cascaras amarillas y su pulpa dulce y roja.
Cuatro nidos de pájaros; uno de sinsonte y tres de tortolitas . Tan contento de mi descubrimiento me sentí que en el próximo viaje al pueblo compre abonos para los arboles y semillas para alimento de pájaros y, de paso, le lleve a Esther, en una pequeña canasta, Cherries
ciruelas y un mango de roja y brillante cascara.
La limpieza y mis descubrimientos me alejaron un poco de la guerra con Bastet ; solo de vez en cuando cargaba mi escopeta con uno o dos “bombazos” y le tiraba.
De los libros seleccionados ,durante tanto tiempo para leerlos en mi retiro, apenas tenia por la mitad el primero; de mis siestas en mi hamaca Nicaragüense , Después del gran “regalo” de mi nieta solo he podido disfrutar de unas pocas horas de abandono . La aparición de Bastet , nuestra guerra , la limpieza de mi terreno con el descubrimiento de los nidos y de los frutales y, ahora, la “gran” noticia de que Bola de Pelos esta preñada . Por las nuevas actitudes de la gata y por el tamaño de su incipiente barriga, la lleve donde Esther y tras un pequeño examen lo corroboro.

¡ Seis cachorros...! Seis pequeñas bolitas de pelos ; seis nuevos problemas a mi “retiro” .
Alimentación especial, el traslado de la caja de Bola de Pelos del porche hacia dentro del trailer, la primera visita de Esther a mi casa , la permanencia de mi nieta durante una semana con el pretexto de cuidar a los cachorritos . La visita de mi hijo y su sorpresa al verme con tan buen semblante y tan “rejuvenecido” . La promesa de Esther de volver a visitarme y de su afirmación de que el padre de mis pequeñas bolitas de pelos era bastet , cosa que diagnostico por el color y figura de algunos de los mininos, determinaron, en mi, concluir la guerra con el gato amarillo.
A marre un pañuelo blanco al cañón de la escopeta ; Salí al patio y la coloque recostada, a un pequeño arbusto de grandes flores rojas que crecía salvaje justo frente al fresco y confortable porche. Lentamente y con el plato,donde come Bola de Pelos, lleno de jugosas y frescas bolitas lo deposité en el suelo del porche y me senté tranquilo en una de mis butacas esperando ver aparecer a mi “ex-enemigo” .
El ruido que hacían las duras bolitas en el plato de metal me despertaron ; Bola de Pelos comía del alimento que yo le había ofrecido a Bastet en señal de paz; la gata levanto la cabeza y me lanzo una mirada de agradecimiento al tiempo que una gallarda y altiva figura amarilla salia lenta y arrogante de dentro de mi trailer donde estaban mis pequeñas bolitas de pelos ...¡ Bastet...!
Mi gato amarillo.