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Inicio / Cuenteros Locales / Hanyoudem / Romeo & Cinderella - Los días que pase contigo (2)

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Mi extraña nueva amiga

Nota del Autor: Esta es la segunda parte de mi historia espero y les agrade. Entren a mi perfil para leer la primera parte. De ante mano gracias por leer esto.

Se abre de nueva cuenta el telón y podemos ver la última escena del capítulo anterior. Es de noche y Santiago sigue esperando parado a que Yessenia se aleje, extrañamente le vemos a éste con una sonrisa en el rostro. Por un momento la cámara apunta al cielo, podemos ver estrellas muy bien definidas, la escena permanece así hasta que el narrador deja de hablar, luego se funde en negro (Va desapareciendo lentamente). Ahora en la imagen vemos una calle con varias casas iguales, solo algunas son diferentes y resaltan. Hay tres postes de luz en la banqueta que emiten luz blanca. Parece una unidad habitacional.

Santiago (Voz en Off): ¿Les ha pasado alguna vez, que por algún motivo se sienten artos de todo y no saben por qué? Ya saben de esas veces en que no les interesa nada, pues nada les parece “Entretenido”. Pues a mí me pasaba muy seguido, y aun me pasa a veces. Pero saben no siempre fue de esa manera. De hecho en algún tiempo esperaba con ansias todos los días (Suspiro breve) Bueno ese no es el punto. Lo que les contare hoy es sobre el segundo día que la vi. Pero para contarles eso debo contarles algunas cosas antes.

La escena cambia y ahora vemos que el cielo sigue siendo oscuro, pero hay algo diferente. Una casa de color blanco está enfocada al centro y la imagen se va acercando a ella. Ésta tiene un jardín con pasto y arbustos pequeños a los lados simulando una barda, también podemos notar algunos cuadros de cemento que simulan un camino a la puerta igual de color blanco. La casa tiene protecciones de color blanco con figuras pequeñas que las adornan. Es una casa relativamente pequeña, tiene dos pisos y el piso de arriba una gran ventana, que por lo húmedo de los vidrios nos indica que hace frio.

Santiago (Voz en Off): Recuerdo que en esos tiempos cuando iba a la escuela (Cierta nostalgia) tenía que hacerlo caminando y siempre hacía frio Hehe (Una breve risa burlona)

Ahora entendemos que esa casa que observamos es la casa de Santiago (O así lo asumimos) y también por el hecho de que las demás luces están apagadas constatamos que es de madrugada.

Santiago (Voz en Off): Siempre me ha costado levantarme temprano, es por eso que odiaba asistir a clases en la mañana… Aunque por alguna razón siempre me terminaba levantando… Me ponía a pensar “Si me quedo ¿Qué hare en mi casa?” Eso no me impidió llegar tarde más de una vez… Eso de apagar el despertador y decir “5 min más” es una trampa mortal… Créanme.

Ahora la escena se centra en una habitación algo oscura, solo la poca luz blanca del poste de luz que entra por la ventana es lo que nos permite ver. Es la habitación de arriba (Por el tamaño de la ventana). Hay una cama matrimonial a lado de la ventana, extrañamente solo una persona duerme en ella. Al principio no se sabe quién es. Esa persona duerme boca abajo, tapado hasta la cabeza y con una almohada encima de ésta. Por la silueta creemos que es Santiago.
De pronto empieza a sonar un tema gracioso de celular. Es la alarma y está marcando las 5:45am. Entre quejidos guturales de inconformidad que nos dan a entender “¿Por qué suenas ahora?” observamos una mano saliendo de entre las cobijas. La cámara enfoca un poco más de cerca, y en efecto el rostro adormilado nos dice que es Santiago quien aun dormía. El sonido del celular se detiene y el joven vuelve a cerrar los ojos. De vuelta la cámara sale por la puerta y ésta se cierra detrás. Recorre los pasillos de la casa hasta bajar las escaleras y llegar a la sala. El reloj marca ahora las 6:00am (El tiempo pasa rápido). La cámara sale de la casa y el amanecer esta próximo, el horizonte se nota rojizo y matizado.

Santiago (Voz en Off): Parecía que por más que me pasara no aprendía a levantarme temprano. Por eso he aquí un consejo… Nunca apaguen la alarma del celular (Suspiro) Mejor póngale “Sonar más tarde”

Volvemos a la habitación, los rayos del sol despiertan a Santiago, este se sienta en la cama (aun no abre bien los ojos) y recoge el celular, observa la hora 6:30am.

Santiago: (Expresión de terror) ¡Maldita sea! ¡Estúpido celular! ¡¿Por qué demonios no sonaste?!

Santiago (Voz en Off): Después me di cuenta de que yo era el que lo apagaba… Lo que más me sorprendía de mí era mi súper velocidad para poderme alistar a tiempo y llegar a la escuela… Bueno eso solo es algo…

Mientras habla vemos una versión exagerada y casi burlona de su “Súper Velocidad”, nos recuerda a alguna caricatura. Vemos que durante esta parodia el joven sale disparado corriendo por el camino que siguieran él y Diego, solo que ahora está algo frio y no tan claro el día. Con la respiración algo agitada cruza la puerta de la escuela, 3 min después de entrar la cierran y vemos en su rostro alivio y una risa que expresa “Jajá de nuevo lo volví a lograr soy genial”.

Diego: No sé cómo lo logras… Siempre llegas

Santiago: Jajajaja años de práctica mi querido Padawan

Diego: Jajajajaja si como no

Entran todos los alumnos a sus clases, el patio de las instalaciones ahora se ve desierto. El sol aún se oculta entre nubes. Los maestros entran a sus salones y el timbre de la escuela anuncia el comienzo de las clases.

Santiago (Voz en Off): Diego era mi compinche en esos tiempos, gran amigo he de mencionar, y aunque callado, a veces hacia comentarios muy buenos. Creo que desde entonces me llevaba bien con personas raras…. (Pausa breve) Mis mañanas eran todas iguales… O eso sentía yo… Pero raramente esa mañana recordé lo que me había dicho esa niña el día anterior: “No todos los días son iguales, siempre hay algo que los hace ser diferentes” No supe porque, pero no pude quitar esa sonrisa tonta de mi rostro. Era tan raro verme así que todos me preguntaban “¿Te sientes bien?” Yo lo sentía más como burla que preocupación o interés por mí, pero no me importaba, yo estaba bien y eso era lo que me interesaba.

Mientras Santiago la hace de narrador pasan varias escenas que acompañan lo que él dice, algunas nos recuerdan a la anterior, donde el mordía una pluma pero hay algo diferente, sus ojos parecen estar soñando. Otras son diferentes, pero en general se le ve feliz al chico. Pasados unos momentos escuchamos sonar el timbre de la escuela, las clases han terminado. Santiago recoge sus cosas con cierta emoción y se dirige a la salida del salón. Esta vez no espera a Diego, se dirige a toda prisa a su casa. Y justo cuando está a punto de llegar, una linda chica se cruza en su camino y se posa enfrente de él con ambas manos cruzadas en la espalda. La chica lleva uniforme pero vemos que es diferente al uniforme de la escuela de Santiago. El uniforme de ella es de color azul y el del chico es verde.

-¡Hola! ¡¿Cómo estás corazón?!- El joven parece tan consternado por esto como deberíamos estar nosotros. La niña habla con cierta emotividad en la voz, una voz muy linda – No creí encontrarte, siempre tardas más –

Santiago: ¡Ah! (Reaccionando de golpe) Jennifer (Su sonrisa refleja “¿Qué le digo?”) ¿No deberías estar en la escuela?

Jennifer: (Haciendo un gesto de inconformidad) Si pero aun no me voy… (Se acerca a él y lo abraza con cariño) Es bueno verte mi amor (Esta contra el pecho de Santiago y habla bajo, casi como si se lo dijera a su corazón)

Santiago: (Devolviendo el abrazo) Lo mismo digo…

Santiago (Voz en Off): Creo que no mencione que tenía novia…. Bueno ella es Jennifer y es mi novia en turno, ella no asiste a la misma escuela que yo y solo la veo de vez en cuando. Es muy linda… De hecho la conocí cuando yo tenía 13 años, nos hicimos amigos y nos llevamos muy bien. Ella se podría considerar como mi primer amor, mi amor a primera vista, y muchas cosas más. Es una niña de lo más especial, y me gustaba mucho. Pero en ese momento por alguna razón me sentía muy extraño, lo único que pude hacer es bajar la cabeza, continuar abrazándola, y sentir su aroma. Era un aroma muy dulce, aun lo recuerdo perfectamente.

El abrazo termina y Santiago saca el celular de su bolsillo para revisar la hora, son la 1:45pm y sabe perfectamente que debe darse prisa.

Santiago: Se te hará tarde… Vamos tienes que ir a la escuela (Tratando de zafarse)

Jennifer: Puedo llegar un poco tarde sabes (Con unos ojos que brillan)

Santiago: Tienes que llegar temprano anda (Insistiendo)

Jennifer: Mmmm (Bajando la mirada por un momento) ¿Te pasa algo? Tú siempre quieres que me quede contigo… Es más
venía para ver si te encontraba y quedarme contigo…

Santiago: Mmmm No quiero que empieces a faltar por mi… Además podemos salir el sábado si quieres…

Jennifer: Esta bien… (Algo decepcionada) Si eso quieres… Te veo el sábado…

La niña se para de puntas y besa a Santiago, vemos que este corresponde hasta donde puede. Da la impresión de que su cuerpo está en ese lugar pero su mente no. El beso termina y ella y él continúan caminando hasta avanzar unas calles, después de eso él y ella se separan. Se nota que Santiago no está en sus cinco sentidos, se le ve confundido y pensativo, vuelve a adoptar la pose de: Cabeza baja, auriculares, manos en las bolsas, y se dirige a su casa.

Santiago (Voz en Off): Francamente aún no sé qué pasaba por mi cabeza en esos días. Lo único que sé es que estaba confundido porque quizá en el fondo sentía algo. Pero en fin… Recuerdo que pese a mis esfuerzos por llegar temprano llegue a mi casa a las 2:30pm. Mi madre aún estaba molesta y me puso a hacer el quehacer de la casa, ya saben lavar platos, barrer y cosas por el estilo. No es que me molestara, de hecho estaba acostumbrado a hacerlo, pues desde los 8 años me quedaba solo en casa por muchas horas y en las tardes, hasta llegar la noche, muchas veces no los vi llegar. Bueno eso solo es parte de mi vida pasada. Después cuando nació mi hermana, mi madre cambio su horario de trabajo, en ese tiempo trabajaba en la mañana y en las tardes estaba conmigo y con mi hermana en casa. Mi hermana se llama Andrea y en ese tiempo tenía 5 años, asistía al Kínder. Bueno eso se los contare mejor un poco después.

Pasan ante nosotros escenas de Santiago cuando era niño, de cómo fue creciendo, y en especial de él haciendo tarea y comiendo solo en la mesa. Hasta cierto punto parece muy triste. Las escenas van cambiando paulatinamente y vemos a su hermana, una pequeña niña que no se parece mucho a él. Entre otras escenas, de él, su hermana y su madre, las escenas ya no nos provocan tanta nostalgia.

Santiago (Voz en Off): En mi afán de terminar rápido acabe a las 4:05pm, claro no solo hacía quehaceres, también me di tiempo de comer y cambiarme rápido, ya saben mi “Súper Velocidad”, el problema no era ese. Yo no quería llegar tarde y el parque me quedaba a 1 hora de distancia con poco tráfico y saliendo a la voz de ya. Debía darme prisa y lo sabía perfectamente, al terminar salí de mi casa diciendo “Regreso después” y mi madre como siempre me dijo: “Cuídate y no regreses tan tarde”. Recuerdo que iba corriendo lo más rápido que podía. La primera vez que vi a Yessenia eran alrededor de las 5:00pm y quería llegar temprano.

Vemos ahora a Santiago corriendo de frente a la cámara, se nota agitado y con prisa. De pronto observamos que se detiene en seco, su respiración aun es agitada pero trata de controlarse, se queda estático y sonríe espontáneamente.

Santiago (Voz en Off): (Suspiro) Hehe lamentablemente no llegue tan rápido… Creo que eran las 6:00pm. Ella estaba sentada en la banca con las manos sobre sus piernas, y mirando al cielo. No sé porque pero sonreí cuando la vi… Ella tenía ese aire tan inocente y lindo (Se nota la ilusión en la voz cuando Santiago habla). Aún estaba ahí esperándome, y eso me hizo sentir feliz.

Santiago: (Con una mano en la nuca) Hehe este… Perdón llegue tarde… Lo lamento mucho…

Yessenia: (Sonriendo tranquilamente) A… No te preocupes… Lo importante es que llegaste N (suena como ene)

Santiago: ¿N? A… ¿Por lo de Near? Hehehe te acordaste (Sonriendo)

Yessenia: Siéntate… Te vez cansado…

Santiago: ¡Claro gracias!

Ambos están sentados de tal modo que tienen en frente al otro, raramente se sonríen como si se conociesen de toda la vida. Es una escena linda.

Yessenia: ¿Y qué tal tu día niño con ojos Shinigami?

Santiago: Jajajaja aburrido… Bastante ig… (Se detiene a pensar y cambiar su palabra) Bueno… Fue normal…

Yessenia: Que bien eso me da gusto

Santiago: ¿Y el tuyo niña que ama Naruto?

Yessenia: Jajá pues el mío fue bueno… Ya sabes escuela y demás…

Santiago: Y… ¿Tienes correo?

Yessenia: Si ¿Lo quieres?

Santiago: ¿Me lo darías? (Con una sonrisa en el rostro que nos da a entender “Ándale por favor”)

La joven por un momento lo observa mientras se muerde suavemente el labio inferior. Sin decir nada saca un cuaderno de su mochila, escribe algo, arranca lo que escribió (Un pequeño pedazo de papel), lo dobla por la mitad y se lo entrega en la mano a Santiago mientras sonríe. El joven abre ese pequeño trozo de papel y en efecto es una dirección de correo electrónico.

Santiago: ¡Gracias! (Se le ve feliz)

Yessenia: ¡De nada! Ahora cuéntame todos tus días iguales…

Santiago: Jajajaja con todo gusto niña

Yessenia: Claro niño

La escena continua y ellos hablan con familiaridad, vemos que eventualmente se ríen de vez en cuando. A Santiago se le ve feliz.

Santiago (Voz en Off): Aun no sé porque sonreía cuando estaba con ella. Lo cierto es que me hacía sentir muy tranquilo y olvidarme de todo. De nuevo el tiempo no era mi mejor amigo. Oscureció rápido, creo que fue mi culpa por haber llegado tan tarde. Nos despedimos igual que el día anterior. Y todo parecía ir muy bien, aunque fuera breve el tiempo que estaba con ella, me gustaba mucho, y no puedo imaginar una mejor manera de pasarlo. La luna brillaba como pocas veces ese día. Era hermoso pero triste, anunciaba que cada uno debía regresar a su casa, no sin antes pedirle algo.

Santiago: Oye Yessenia… Mañana… Mañana ¿Te puedo ver de nuevo? (Se nota algo apenado su tono de voz)

Yessenia: Claro… Suena bien… Pero esta vez llega más temprano… Es bueno pasar tiempo contigo y si es mas es mucho mejor (Sonríe y da media vuelta) Nos vemos N… ¡Sayo!

Santiago: ¡Hasta luego! ¡Cuídate! Y… Gracias (ese “gracias” solo lo pudo escuchar él)

La escena parece repetirse, pero esta vez ella voltea y le vuelve a sonreír. Observamos que el rostro de Santiago parece brillar de alegría. La cámara apunta al cielo, las estrellas brillan, y ahora podemos constatar que lo que decía Santiago sobre la Luna es cierto. Esta noche brilla con especial intensidad. La cámara se queda en esa toma hasta que Santiago deje de hablar.

Santiago (Voz en Off): Saben… Había algo en Yessenia que la hacía muy especial para mí… No solo era que teníamos gustos similares, también había algo en ella, no se… Un calor que me reconfortaba… Aunque lo más cerca que había estado de ella hasta ese momento eran los 20cm que nos separaban cuando se sentaba a mi lado. Aun no sabía que pasaba, lo cierto es que tenía su MSN y ahora no solo la podría ver en el parque, también podría hablar con ella por MSN. Hasta cierto punto creo que me gustaba ser el único que la conocía, raramente se sentía extraño, era como estar guardando un secreto. Un secreto que me hacía feliz, muy feliz, y aun me pregunto ¿Por qué?

FUNDIDO EN NEGRO

Texto agregado el 25-04-2012, y leído por 87 visitantes. (2 votos)


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