soy una forma mórbida
soy la armonía amorfa
lo horroroso y censurable
el caminante despreciable

un hombre algo laudable,
el abrazo,
que no deja de ser superfluo
el beso escueto

soy Don Quijote
luchando con su locura
el caballero errante
que discute con su sombra

soy Edmundo Dantés
el ser prolijo y bizarro
decidido a terminar
con su deleznable Danglars

ser asiduo y perseverante
amante en demasía del amor y conocimiento

aquel señor nadie
con poco que contar
pero mundos enteros
por inventar

soy la boca que lanza flechas
y el corazón que las recibe

el panda, el koala,
el animal en vía de extinción
soy...o no soy...
universos enteros

soy un cuerpo sin patria, un alma
sin cielo, sin infierno...